La Sra. Dina Boluarte vendió su alma al diablo, desconociendo los principios por los que se fundó la República peruana, reduce al Perú a una republiqueta dirigida por mafias diseminadas en la administración estatal (Congreso, Ministerios, Administración de Justicia), se luce con su falta de conocimiento de la realidad y no hacen nada por revertirlo, basado en un modelo económico que desgarra a las familias a una extrema pobreza, 80% es trabajador informal, el desarrollo entre regiones es altamente desigual, y Dina Boluarte perora con sarcasmo: “No entiendo por qué mis hermanos apurimeños se levantan en contra de su paisana Dina Boluarte cuando yo no he hecho absolutamente nada para que esta situación exista o se dé”. La derecha peruana encaja en la arrogancia de la pobreza ética, moral que lleva al descalabro al Perú, la crisis económica se profundiza cada vez más desde el año 2009, significa que el modelo económico establecido en la espuria Constitución de 1993 ya no funciona, muchas decenas de muertos (2022-2023), miles de trabajadores que agonizan en vida, ¿qué hicieron por cambiar? Nada.
Quienes creyeron que la derecha reconoce los tratados internacionales, normas internacionales, acuerdos bilaterales, que actúa en función a la democracia, justicia, etc., se equivocan, la derecha atropella la dignidad del ciudadano y se impone con la fuerza de la represión. Keiko Fujimori con fecha anterior al pronunciamiento del TC, sabía que el exdictador Fujimori saldría de la cárcel, en efecto, festejo la excarcelación del sentenciado Fujimori por delitos de lesa humanidad, corrupción; paralelamente, la suspendida fiscal Patricia Benavides que está investigada como líder de una organización criminal, era ovacionada en un evento titulado “Día del triunfo de la democracia” con la participación de apristas, decano del Colegio de Abogados de Lima, jefe del Comando Conjunto de la FF.AA. Ambos hechos nos demuestran quienes realmente gobiernan en el Perú, y la forma cómo gobiernan. Moyano, congresista de Fuerza Popular, ha planteado una “opinión consultiva” en torno a la vigencia del Estatuto de Roma y la Convención sobre imprescriptibilidad de los crímenes de lesa humanidad, con la intención de buscar anular la sentencia de “Barrios Altos”, “La Cantuta” de Alberto Fujimori y dejar en total impunidad los crímenes ocasionados en su mandato. Los congresistas Cueto, Montoya, Rospigliosi a viva voz reclaman la salida CIDH. Dina Boluarte, ahora se da cuenta que es un títere y su gobierno depende del fujimorismo y aprismo.
La derecha siempre tuvo una trayectoria tortuosa, oscura, e implementa el terror como política estatal, se aplicó el Plan Cóndor en el gobierno del dictador Francisco Morales Bermúdez,en el gobierno de Fernando Belaunde se produjo la masacre de Uchuracay, en el primer gobierno de Alan García se formó el escuadrón militar “Rodrigo Franco” y se perpetró crímenes de Lesa humanidad, en el gobierno del golpista y dictador de Fujimori se formó el escuadrón militar “grupo colina” y se cometieron crímenes de lesa humanidad. ¿A esto se puede llamar democracia? El pueblo siempre fue mancillado en su dignidad, perseguido y asesinado como terrorista, mientras la derecha goza con el dolor ajeno y normaliza la corrupción como algo natural, amparándose en el abuso del derecho.
La derecha dio su apoyo a Dina Boluarte con la idea que, “Dina dará más estabilidad”, comprendieron que vacando al gobierno no es beneficioso, manteniéndose en el Congreso podían copar todas las instituciones, obtendrían una serie de beneficios. Las coordinaciones de Jaime Villanueva(asesor) por encargo de Patricia Benavides(fiscal de la Nación) con cuarenta congresistas a través del chat, demuestra cómo se hacen los arreglos por debajo de la mesa para promulgar leyes, obtener empleos, en la destitución de autoridades, obtener cupos de partidos políticos, etc., y lo hacen con todo desparpajo, no les importa nada, Manuel Gonzales Prada, dijo: “el Perú es un cuerpo enfermo, donde se pone el dedo salta la pus”. La corrupción no es de ahora es desde siempre, son nueve presidentes que se encuentran investigados por casos de corrupción, uno fallecido, varios partidos políticos están siendo investigados como organización criminal, también dirigentes de partidos políticos son investigados por corrupción, es decir, el partido político que debería tener principios, una filosofía, un programa, queda reducido a grupos de mafias, actualmente están inscritas 24 partidos políticos para las futuras elecciones, y otros tantos en proceso de inscripción.
La profunda corrupción en el Perú se refleja en la desigualdad social, según un informe del Laboratorio de Desigualdad Mundial (2022), el Perú es el cuarto más desigual del mundo, esto demuestra la falta de políticas estatales dirigidas a la inclusión social, desarrollo de la sociedad en la permanente búsqueda del bienestar social. La presencia en el gobierno de Dina Boluarte, Otárola, Keiko, Vladimir Cerrón, Castillo, caviares, etc., responde a la viveza criolla, oportunismo, improvisación, lo único que saben es vivir del Estado, promulgar leyes que beneficien a grupos de poder, implementar políticas de represión(DL N°1584, Ley contra disturbios), arrebatando la vida a 49 personas según la Defensoría del Pueblo (en los anteriores artículos me equivoque en la cifra de muertos, ahora corrijo), dejando a la población en un total abandono por el Estado, y el crimen organizado que sigue en avance, y la Sra. Boluarte no tiene ningún plan para combatir la criminalidad, a raíz de los diez muertos en la Libertad, se le ocurrió anunciar la manera de “formalizar la minería ilegal”, es una locura, es como estar pensando en formalizar el “tren de Aragua”.
La clase trabajadora debería tener propuestas de reformas profundas que ingresen a debate nacional a través de sus sindicatos, gremios, lamentablemente la CGTP no articula las luchas sociales de los trabajadores pesqueros, transporte urbano, carga pesada, sector salud(médicos, enfermeras, técnicos, sector administrativo), trabajadores de la administración de justicia, docentes universitarios, profesores, campesinos, desempleados, etc., cada sindicato tan sólo se queda en una visión reivindicativa para su sector, aumento de salarios, etc., por eso, la derecha hace lo que le da la gana, y pretende quedarse hasta el 2026. Debemos pronunciarnos, pidiendo la salida de Dina Boluarte y de toda la derecha, también proponer la nueva Constitución, cambio de modelo económico, continuar avanzando en la “consciencia cívica”.
El gobierno de Dina Boluarte, y toda la derecha llevan al Perú a un caos incesante, crisis económica, crisis política, crisis social, huelgas, muertes, desempleo, pobreza, no saben qué hacer en el gobierno, ¿de qué se pavonean?, más sólo buscan beneficiarse. El pedido de nuevas elecciones se hace necesario, renuncie Sra. Dina Boluarte.
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