El gobierno griego no parece dispuesto a invertir recursos en el sistema público de salud y reducir ese tercio de ciudadanos sin cobertura sanitaria, en su lugar ayer anunció análisis gratuitos para quienes carecen de seguro médico. El programa presentado tendrá una duración de seis meses y permitirá realizar en determinados hospitales estatales exámenes preventivos […]
El gobierno griego no parece dispuesto a invertir recursos en el sistema público de salud y reducir ese tercio de ciudadanos sin cobertura sanitaria, en su lugar ayer anunció análisis gratuitos para quienes carecen de seguro médico. El programa presentado tendrá una duración de seis meses y permitirá realizar en determinados hospitales estatales exámenes preventivos a desempleados y a cuantos carecen de seguro médico, aunque los diagnósticos no incluirán su tratamiento.
La medida llegó el mismo día en que fueron publicados los resultados de la conferencia anual sobre salud de la Cámara Heleno-Americana, y que constató un serio deterioro del sistema público y un aumento muy grande en el uso de los servicios sanitarios privados por parte de la población.
El profesor de medicina social de la Universidad de Tesalónica Alexis Benos explicó al diario Alterthesse que la política del gobierno que «desarticula y priva de financiación y de personal adecuado al sistema público de salud» busca un giro de los ciudadanos hacia el sector privado.
Al mismo tiempo, añadió el académico, «durante años el Estado ha alimentando con fondos públicos un sector privado propiedad de grandes grupos económicos», mientras «ha contribuido al colapso de los fondos de pensiones».
El golpe definitivo vino de la reciente ley de servicios sanitarios que, bajo «la lógica del modelo estadounidense», dota a los hospitales estatales de inversores-accionistas privados que determinarán su gestión, lo que para Benos «constituye, de hecho, la privatización total de los servicios de salud».
Cerca de una cuarta parte de la población bajo el umbral de la pobreza
La situación se agrava por el hecho de que Grecia se encuentra entre los países de la Unión Europea (UE) con mayor índice de pobres, un 23,1 por ciento de la población, según un informe publicado el jueves por la Oficina de Presupuesto del Estado.
Las severas políticas de austeridad y los continuos recortes de salarios y pensiones situaron a dos millones y medio de ciudadanos por debajo del umbral de la pobreza, que para 2013 se estableció en 432 euros al mes para una persona y 908 para una familia de cuatro miembros.
El documento también mostró que Grecia es el único estado de la UE que no ha aplicado la medida de la renta mínima garantizada, por lo que un número aún mayor de ciudadanos se hallan en riesgo de pobreza debido a la privación material y el desempleo. En esta situación se encontrarían 3,8 millones de personas, lo que sitúa al país en el peor lugar de los 28 estados de la UE en relación al riesgo de pobreza, según la oficina europea de estadísticas Eurostat.
Además, los datos de la OCDE sitúan a Grecia en el cuarto peor lugar, entre 35 países, atendiendo a indicadores de prosperidad y calidad de vida, y cifrando la pobreza infantil en un 26,5 por ciento.