Los ciudadanos de Tesalónica convierten la inminente privatización de EYATH en una oportunidad de reapropiación ciudadana de la empresa a través de la Iniciativa 136, que anima a todas las personas a participar en la compra del 40% de las acciones. Ante el anuncio del Gobierno griego de sacar a concurso público el 40% de […]
Los ciudadanos de Tesalónica convierten la inminente privatización de EYATH en una oportunidad de reapropiación ciudadana de la empresa a través de la Iniciativa 136, que anima a todas las personas a participar en la compra del 40% de las acciones.
Ante el anuncio del Gobierno griego de sacar a concurso público el 40% de las acciones de EYATH, la empresa que gestiona el Agua y Saneamiento de Tesalónica, el movimiento en defensa del agua pública de la ciudad, pone en marcha La Iniciativa 136.
La ‘Iniciativa 136’ toma su nombre del resultado de dividir el valor estimado de EYATH entre el número de contadores abastecidos y pretende involucrar a todos los ciudadanos en la compra del 40% de la empresa. Busca transformar el riesgo de privatización inminente, en una oportunidad para recuperar el control ciudadano de las cuestiones que les afectan. En este caso, la gestión del agua.
Para ello, se propone crear un movimiento cooperativo, que combine la solidaridad comunitaria y el respeto del medio ambiente y que ofrezca una alternativa a la deriva capitalista. Esto es, un modelo productivo y económico que combine la propiedad colectiva y el incentivo individual, al tiempo que se respete el medio ambiente y se protejan los recursos naturales a través de la promoción de una gestión del agua pública(que no estatal), sin fines de lucro, democrática, racional y sometida al control social.
La privatización de EYATH
Bajo los auspicios de la Troika (Unión Europea, Fondo Monetario Internacional y la Comisión Europea), el gobierno griego anunció en febrero de 2012 que pondría en concurso público el 40% de las acciones y la gestión de la Compañía de Agua y Saneamiento de Salónica (EYATH), acelerando así el proceso de privatización que ya estaba en marcha. El hecho es que entre las condiciones exigidas por la Troika a cambio de las ayudas financieras, se encuentran las privatizaciones de las empresas de agua de Tesalónica y Atenas, entre otros muchos servicios públicos.
Según se extrae del tercer memorándum griego, las razones son que: «La privatización de las empresas públicas contribuye considerablemente a la reducción del déficit nacional así como de los costes con cargo a los Presupuestos Generales del Estado. De esta forma, el objetivo es favorecer la productividad de las empresas, dar competitividad a la economía y atraer a inversores extranjeros» En este memorándum, las autoridades griegas se comprometían a aplicar de manera rápida y eficaz el programa de privatizaciones con el fin de recaudar unos 50 mil millones de euros. Y a tal efecto, eliminaban cualquier traba legal existente a la futura privatización de EYATH.
Al contrario de lo que dicho Memorándum pueda llevar a pensar, EYATH ha demostrado ser una empresa eficiente y rentable, que ofrece un servicio de calidad a precios bajos y que no tiene pérdidas financieras. Más bien al contrario, las ganancias de la compañía en los últimos años son cuantiosas. En 2010 EYATH obtuvo unos beneficios de 12,4 millones de euros, que ascendieron a 20,1 millones de euros en 2011. Por lo que cuesta creer que esta empresa pueda ocasionar una carga a los Presupuestos Generales.
Pero si de lo que se trata es de recaudar, tampoco parece que la opción elegida por el Gobierno Griego sea la adecuada. En total, la suma de las ganancias obtenidas en los últimos 5 años ascienden a 75millones euros. En cambio, el precio de la adquisición, después de la caída de su valor en bolsa, no es más que de 55 millones de euros. Por lo que no solo supone un evidente caso de «privatización de las ganancias, socialización de las pérdidas», sino que además se pretende realizar una venta a precio de saldo.
La respuesta ciudadana.
Si bien los anuncios oficiales al respecto de la privatización de EYATH se producen en 2011 y se van concretando más adelante, los ecos sobre una posible privatización ya estaban en el ambiente desde 2010. Por eso, el movimiento en defensa del agua pública de Tesálonica, que ya se había formado dos años atrás para frenar las ansias de privatización del gobierno conservador de turno, se vuelve a poner en marcha.
Esta vez, los trabajadores de EYATH, movimientos sociales, organizaciones y ciudadanos de Tesalónica, al calor del movimiento indignado, se asamblearon durante meses en la Torre Blanca. Su visión, defensora de que especular con el agua podría poner en peligro la salud pública y el medio ambiente de la región y partidaria de que la propiedad de EYATH correspondiera a los ciudadanos de Tesalónica, se concretó el 10 de Agosto, en ‘La Iniciativa 136’, que fue lanzada a toda la ciudadanía en su conjunto y que a día de hoy sigue su curso.
La ‘Iniciativa 136’ toma su nombre del resultado de dividir el valor estimado de EYATH entre el número de contadores abastecidos y pretende involucrar a todos los ciudadanos en la compra del 40% de la empresa. Busca transformar el riesgo de privatización inminente, en una oportunidad para recuperar el control ciudadano de las cuestiones que les afectan. En este caso, la gestión del agua.
Para ello, se propone crear un movimiento cooperativo, que combine la solidaridad comunitaria y el respeto del medio ambiente y que ofrezca una alternativa a la deriva capitalista. Esto es, un modelo productivo y económico que combine la propiedad colectiva y el incentivo individual, al tiempo que se respete el medio ambiente y se protejan los recursos naturales a través de la promoción de una gestión del agua pública(que no estatal), sin fines de lucro, democrática, racional y sometida al control social.
Para proceder a la venta de la empresa, el gobierno griego, dividió la compañía en dos partes: una, dedicada a la gestión y facturación, y la segunda, a las infraestructuras y mantenimiento. La intención del Gobierno es vender la primera y más rentable en una licitación pública, lo que se corresponde con el 40% de EYATH, mientras que la segunda permanecerá en manos del Estado.
Lo que se propone con esta iniciativa es que los ciudadanos adquieran ese 40% de las acciones y tomen las riendas de la empresa, para tener así el control social del agua de la ciudad, lo que constituiría un paso hacia la democratización de la sociedad y les permitiría realizar una gestión no lucrativa del agua, que primara las políticas sociales y la protección del medio ambiente.
La iniciativa 136 al detalle.
La organización necesaria para poder optar a esta oferta pública de acciones se basa en dos estructuras: Por un lado, cooperativas establecidas en todos los municipios de Tesalónica, en las que las personas físicas o jurídicas pueden integrarse con el pago de 140€ (que puede hacerse por cuotas). Y por otro, una sociedad anónima llamada Social EYATH. SA, en la que se integrarán las distintas cooperativas y que será la entidad que llevará a cabo la adquisición del 40% y la gestión de EYATH.
Los órganos de gobierno de las cooperativas son la Asamblea General de todos los miembros, el Consejo de Administración compuesto por 11 miembros y el Consejo de Vigilancia compuesto por 7 miembros. La elección de los miembros de la función pública se realiza a través de una lista electoral única.
Las cooperativas reunirán el capital necesario para la adquisición de EYATH, depositando el dinero en una cuenta especial. En el caso de la adquisición no se logre, el dinero se devuelve a la cuentas bancarias de los miembros.
Por otro lado, la empresa ‘Social EYATH SA (KEYATH. SA)’ estará formada por las cooperativas accionistas de la empresa y perseguirá los mismos objetivos de éstas. El capital inicial será de más de 10 millones de euros, con incrementos sucesivos en el capital social hasta se alcance la cantidad necesaria para adquirir el 40% de la empresa.
Social E.Y.A.TH. S.A. será administrada por una Asamblea General, un Consejo de Administración integrado por 13 miembros, un Consejo de Vigilancia compuesto por 9 miembros y un Consejo Social. La Asamblea General está integrada por representantes electos de las cooperativas. El número de representantes de cada cooperativa en la Asamblea General es proporcional al porcentaje del capital social de la cooperativa en el capital total de la compañía. El director general de K.E.F.A.TH. SA no es miembro de la Junta, pero es elegido por el Consejo de Administración en base a los criterios establecidos por los estatutos y los procedimientos acordados por la Asamblea General de Accionistas.
La participación está abierta a todas las personas físicas o jurídicas, son excepción de los partidos políticos. Según Costas Marioglou, presidente del sindicato de EYATH e impulsor de la Iniciativa 136, ‘todo el mundo necesita el agua para vivir, sean anarquistas, socialistas o conservadores, por eso deben venir, pero no como partidos políticos. No queremos pancartas. Ni que nadie se apropie de este proyecto.’
El progreso de la Iniciativa 136.
En el año y medio de recorrido que lleva la Iniciativa en marcha, los resultados han sido escasos. Hasta la fecha se han creado 6 cooperativas en distintos municipios y otras 10 están en fase de creación. Sin embargo, debido a varios problemas burocráticos, sólo una de ellas tiene una cuenta bancaria propia.
Por otro lado, la situación en Grecia se ha recrudecido debido que las medidas de austeridad, cada día más severas, empobrecen y merman la calidad de vida de las personas. Lo que dificulta que participen en este proyecto. Según Kostas Marioglou, ‘cuando lanzamos la Iniciativa había personas que se podían permitir desembolsar 140 euros, pero ahora ese es el presupuesto de una familia para pasar dos semanas o un mes’.
Las últimas informaciones recibidas por el movimiento del agua de Tesalónica, la oferta pública de acciones se lanzaría en un año. Por otro lado, tampoco se descarta el hecho de que una posible caída del Gobierno actual y un cambio a un gobierno socialista, pare el proceso de raíz, como ya ocurriera en el pasado.
Mientras el ámbito político sigue su curso, en el movimiento europeo del agua, se empiezan a dibujar nuevas posibilidades para garantizar la viabilidad de esta compra. Así, en la segunda asamblea del agua celebrada en Florencia 10+10 el pasado mes de noviembre, Renato di Nicola, miembro del foro Italiano del agua, proponía que el resto de países se solidarizaran con el pueblo griego y les ayudaran con la compra de esta empresa, visto que el gran problema que tienen es el dinero.
Esta propuesta fue trasladada al movimiento del agua de Tesalónica y fue recogida con ‘entusiasmo’, declara Kostas Marioglou, añadiendo que la fórmula que creen adecuada es que ‘otros colectivos o personas de países europeos que quieran apoyar la iniciativa, presten el dinero para permitir adquirir la empresa’. Aclarando que, ‘una vez adquirida, se devolvería el dinero. Algo que no sería difícil, ya que la gestión del agua no es deficitaria’.
Cuando Renato lanzaba la propuesta en Florencia, admitía no saber si eso era un sueño o si podría viable. Kostas afirma que le gustaría que esta iniciativa fuera un ejemplo para otras ciudades europeas, un modelo nuevo de gestión empresarial, que pudiera compartir sus conocimientos con otros proyectos que emergieran en el futuro. ‘Incluso, podríamos crear un fondo común europeo para que financiar otras iniciativas similares. Tenemos tantas grande ideas para esta empresa… que al final no se si lo podremos conseguir’, confiesa.
Ideas a parte, la Iniciativa 136 sigue su curso según el plan previsto. La duda sobre si este sueño puede hacerse realidad, si se puede conseguir que las personas de Tesalónica puedan recuperar el control del agua de la ciudad, sólo se puede despejar con el tiempo y con la práctica.