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Llamamiento a favor de la paz y el desarme

Fuentes: Ctxt

Pedimos a los políticos que no olviden las dos grandes guerras que ensangrentaron el pasado siglo el continente y trabajen activamente a favor de las soluciones diplomáticas

Alarmados por el lenguaje orwelliano que se ha instalado en el discurso político europeo según el cual la guerra es el camino hacia la paz mientras que la paz sólo lleva a  más guerra, hacemos un llamamiento a la cordura.

Los ciudadanos europeos nos hemos convertido en pasajeros involuntarios de un tren conducido por unos gobernantes que,  con el declarado pretexto de “hacer sangrar a Rusia”, pretenden ignorar las consecuencias desastrosas de un conflicto del que todos seremos perdedores.

En vísperas de anteriores conflictos europeos, por ejemplo la Primera Guerra Mundial, valientes intelectuales de las naciones enfrentadas, entre ellos Jean Jaurès, Romain Rolland, Bertha vonSuttner o Bertrand Russell, se pronunciaron públicamente a favor de la paz, aunque por desgracia sus voces no fueran atendidas.  

Hoy  es atronador en todos los países el silencio de los  intelectuales, que,  al igual que el resto de los ciudadanos europeos,  parecen preocupantemente anestesiados. Y cuando alguno decide hacer oír su voz a favor de las soluciones diplomáticas es inmediatamente difamado como “marioneta de Putin”.

Condenamos inequívocamente,  por contraria al derecho internacional, la invasión rusa de Ucrania, pero somos conscientes de que esa tragedia es consecuencia también de la persistencia de una organización militar, la OTAN, calificada de “defensiva” y que, lejos de disolverse al no tener ya enfrente al bloque comunista, siguió ampliándose y llevó su expansión hasta las fronteras mismas de Rusia frente a las promesas que se le hicieron entonces al más alto nivel.

La guerra de Ucrania dura ya tres años; las víctimas a ambos lados superan con mucho el millón, aunque ninguno de los países enfrentados dé cifras oficiales, entre muertos, heridos y mutilados.

A lo que hay que añadir los millones de ucranianos que huyeron del país, unos a Europa Occidental, otros a Rusia, todos ellos intentando escapar de la violencia. Un auténtico desastre humano.

Los Estados Unidos de Donald Trump, más preocupados por lo que perciben como el creciente poderío de China o la situación de Oriente Medio, parecen decididos a expoliar a Ucrania, y de paso también, a endeudar a Europa, debilitando aún más nuestro Estado social, en beneficio de la industria militar estadounidense.

Y nuestros gobiernos, negándose a aceptar que, dada la desigual relación de fuerzas, la guerra está perdida, arropan al presidente ucraniano prometiendo el envío de más armas y dinero para que el ejército ucraniano siga luchando hasta el último hombre o la última mujer.

Todo ello mientras proponen militarizar de modo acelerado nuestras naciones con el espantajo de un enfrentamiento con Rusia.

¿Han pensado nuestros gobernantes que, al no existir ya  aquellos acuerdos de limitación de armamentos firmados durante la Guerra Fría y que tanto contribuyeron al mantenimiento de la paz, el enfrentamiento militar con una potencia nuclear como Rusia podría desembocar en una tercera, y esta vez definitiva,  guerra mundial?

Hacemos un llamamiento a los políticos para que no olviden las dos grandes guerras que ensangrentaron el pasado siglo el continente y, abandonando la neolengua de George Orwell, trabajen activamente a favor de las soluciones diplomáticas.

Es la única manera de evitar futuras masacres que  arrasen naciones para el mero lucro de la poderosa industria armamentística.

Firmantes

Fernando Aguiar González (investigador)

Javier Aguirre Santos (profesor)

Luis Alegre Zahonero (profesor de universidad)

Tariq Ali (escritor, director de cine e historiador paquistaní-británico)

Luis Alonso (artesano comerciante)

Txetxu Ausín Díez (investigador)

Olga Belmonte García (profesora)

Constantino Bértolo (crítico cultural)

Marie-Hélène Caillol(politóloga y profesorafrancesa)

Jorge Cano Cuenca (profesor de Filosofía antigua)

Marta Castellanos Garcés (profesora de educación secundaria)

Alberto Conde (profesor y traductor jubilado)

Juan Luis Conde (escritor y profesor de universidad)

Federico Corriente Basús (traductor y autor de informes críticos)

Inés Delgado-Echagüe (maestra de educación infantil)

Graciela FainsteinLamuedra (investigadora)

Thomas Fazi (periodista y escritorangloitaliano)

Carlos Fernández Liria (profesor de universidad)

Amelia Gamoneda (catedrática de universidad)

Marysol García Martínez (pintora)

Susana Gómez López (directora de escena)

Belén Gopegui (escritora)

Ulrike Guérot (politóloga alemana)

Gabriele Gysi (actriz y directora de teatro alemana)

Pollux Hernúñez (traductor jubilado)

Maite Imbernón (profesora)

Corinna Kirchhoff (actriz alemana)

Bernard Legros (periodista belga)

Félix Manzarbeitia Arambarri (patólogo)

Bernd Marizzi (profesor de universidad)

Elisa Martínez Garrido (profesora de universidad)

Ricardo Martínez Llorca (escritor)

Pilar Muñoz (periodista)

Emilio Muñoz Ruiz (profesor emérito)

Viviana Paletta (poeta y editora)

Pepe Peña (profesor de Filosofía, editor, documentalista)

Kees van derPijl (politólogo neerlandés)

Rafael Poch-de-Feliu (ex periodista jubilado)

Manuel Quejido Villarejo (pintor en acción)

Joaquín Rábago (periodista)

Hauke Ritz (escritor alemán)

Andy Robinson (periodista y escritor)

Jorge Rubio Redondo (maestro)

Matilde Sáenz (profesora)

Javier Sáez de Ibarra (escritor)

José Luis Santalla (fotógrafo)

Fernando Sanz Santa-Cruz (médico)

Berta Sarralde (profesora)

Michael von der Schulenburg (europarlamentario alemán)

Federico Soto Díaz-Casariego (profesor jubilado)

Peter van Stigt (periodista neerlandés)

Olegario Torralba (periodista)

Luis Torrego Egido (profesor de universidad)

Jorge Valdano Sáenz (guionista)

Fuente: https://ctxt.es/es/20250301/Firmas/48792/Rafael-Poch-Andy-Robinson-Joaquin-Rabago-52-firmas-llamamiento-paz-desarme.htm