Miles de estudiantes y profesores protestaron hoy en las principales ciudades italianas contra el paquete de medidas para la educación del gobierno de Silvio Berlusconi, que prevé despidos y disminuir fondos al sector. La protesta se extendió a las universidades e instituciones de educación superior, algunas de las cuales, como La Sapienza de Roma (la […]
Miles de estudiantes y profesores protestaron hoy en las principales ciudades italianas contra el paquete de medidas para la educación del gobierno de Silvio Berlusconi, que prevé despidos y disminuir fondos al sector.
La protesta se extendió a las universidades e instituciones de educación superior, algunas de las cuales, como La Sapienza de Roma (la universidad más grande de Italia) o la Oriental de Nápoles, iniciaron paros escalonados, mientras los estudiantes amenazaron con interrumpir el año académico.
El decreto de la ministra de Educación, María Stella Gelmini, prevé recortar fondos por ocho mil millones de euros (unos 12 mil millones de dólares), así como cientos de despidos.
También contempla el retorno al maestro único en las escuelas primarias, donde hasta ahora las tareas en cada clase se dividen entre al menos tres profesores.
A la protesta se han adherido estudiantes, profesores, sindicatos y padres de familia, que anunciaron una gran manifestación para los primeros días de noviembre próximo, mientras para el 17 y el 30 de este mes están programadas sendas huelgas.
Este martes las protestas se verificaron no solamente en Roma, sino también en Milán, Nápoles, Bolonia, Turín, Parma, Génova, Perugia, Palermo, Brescia y otras ciudades, reportaron medios locales.
‘No a Gelmini’ se leía en las pancartas, mientras un grupo de estudiantes envió una carta al presidente de la República, Giorgio Napolitano, a quien pidió no dar el visto bueno a la ‘reforma Gelmini’.
El decreto de ley del ‘paquete educativo’ está actualmente bajo el examen del Parlamento, luego de que el pasado 9 de octubre la Cámara de diputados dio su primera aprobación.
Clases específicas para los alumnos inmigrantes
El Gobierno italiano estudia un sistema de acceso a la escuela sólo para los alumnos inmigrantes, mediante un test de ingreso y clases diferentes, lo que ha provocado hoy duras críticas de la oposición que califican la medida como discrimnatoria.
La Cámara de los Diputados aprobó ayer una enmienda presentada por la ultraderechista Liga Norte, socios en el Gobierno de Silvio Berlusconi, que obliga al Ejecutivo a estudiar medidas para «integrar mejor» a los extranjeros en la escuela italiana.
La enmienda de la Liga Norte, que tiene que continuar su aprobación en el Parlamento para poder ser ley, prevé que los niños inmigrantes entren en el colegio «tras la superación de un test y específicas pruebas de evaluación».
Para aquellos que no las superen, se organizarán «clases puente» para garantizar la inserción del alumno en el grupo correspondiente.
Además, se prohibirá la inserción de los alumnos extranjeros después del 31 de diciembre, y los niños inmigrantes serán distribuidos en las aulas en proporción con el número de alumnos italianos.
Una ayuda para la integración
La Liga Norte asegura que con esta medida se quiere ayudar a los jóvenes inmigrantes a «integrarse mejor» en la escuela y evitar que tengan problemas de educación y que «se retrase» el aprendizaje de los alumnos italianos.
Sin embargo, los partidos de la oposición aseguraron que esta medida es totalmente discriminatoria y que frena la integración de los inmigrantes.
«Es una vergüenza que un país como Italia, puente del Mediterráneo, vote en el Parlamento clases especiales para estudiantes extranjeros», declaró la responsable de políticas juveniles del Partido Demócrata, Pina Picierno.
«Es una propuesta reaccionaria porque da la imagen de una escuela cerrada, con miedo a la diversidad y se mina el serio trabajo de tantos colegios y profesores que han contribuido a la integración», añadió Picierno.