La derecha dirigida por los fujimoristas, se consolidó luego del golpe de Estado del 5 de abril de 1992-2000, al término del gobierno del golpista Fujimori, Keiko Fujimori, su hija, se mantuvo en el poder durante más de 20 años, en su trayectoria política se vinculó con organizaciones de la ultraderecha, APRA, AP, APP, UPP, Podemos, FREPAP.
Las medidas políticas aplicadas desde el año 1992, creaba el descontento
en la población, se acentuaba la corrupción descarada en las altas esferas, en
el año 2016 optaron como método político para acallar los reclamos de la
población y su desborde, investigaciones y denuncias por la Fiscalía a todos
los gobiernos que comprendieron desde Toledo, Alan García, Humala, hasta la
gestión de Kuczynski, las investigaciones de la Fiscalía alcanzaron también a Keiko
Fujimori sin haber sido gobierno, al tener mayoría en el Congreso, impulsó el
golpe de Estado en la modalidad de vacancia presidencial contra Kuczynski(2018),
fue así como asumió la presidencia el entonces vicepresidente Martin
Vizcarra(2018).
El gobierno de Martin Vizcarra tuvo la intención del golpe de Estado en la modalidad de cierre del Congreso, y se efectivizó en el 2019, tras una fuerte propaganda de lucha contra la corrupción, y obtuvo simpatía del pueblo, fue “la espada de Damocles” contra el fujimorismo y sus aliados, significó su derrota en el escenario político, y un menor posicionamiento en las inversiones estatales, esto se puede verificarse en las elecciones al Congreso convocadas para enero del 2020, fueron elegidos tan sólo 16 congresistas, el APRA ni alcanzó a la valla electoral, pero ingresaron UPP, PREPAP, podemos, AP con más congresistas.
Durante el gobierno de Vizcarra se descubre que existen irregularidades en la contratación de Richard Cisneros, más conocido como “Richard Swing”, un cantante poco conocido, en el Ministerio de Cultura entre los años 2018 y 2020, al indagarse se revela que fue contratado como un premio por haber apoyado en la campaña presidencial, lo más grave inmersa en delitos, con la misma suerte corrieron Mirian Morales, Karen Roca, fueron puestas como secretaria general de Palacio, asistente administrativa de Palacio de Gobierno, respectivamente.
Se trata del clientelismo político, práctica política que no es de ahora es desde siempre, a la falta de empleo, de una política real de “meritocracia” se recurre a la compra-venta de voluntades, y se produce en todas las instancias del Estado, como Gobernadores Regionales, Municipalidades, etc., por eso existen “los cuellos blanco”, “los intocables ediles”, “club de la construcción”, etc.
Es un claro ejemplo de cómo la corrupción no obedece a la voluntad de una persona, o a un credo religioso, obedece al sistema capitalista, no es casual la presencia del gran maestro y gurú, Vladimiro Montesinos, ex agente del SIN y ex asesor del golpista Alberto Fujimori, con sus “vladi-videos”, muestra la compra-venta con fajos de dinero a empresarios, políticos, es decir, la participación en la política de la derecha peruana es un trampolín para hacerse “más rico”, más el entonces electo legislador Gerardo Cruz Saavedra Mesones (Perú Posible), hace 16 años, sentenció lo asquerosa frase que pinta la imagen de la derecha: «Juro por Dios y por la plata».
Mientras el Congreso se dedicaba a su labor populista, supuestamente de “defensa” a la ciudadanía, por ejemplo contra los intereses draconianos que imponían los bancos a muchos de sus clientes que se habían prestado dinero, contra la AFP, ONP, que dejaban a muchos afiliados sin mucho dinero, esto no era gratuito, fue para ganar el apoyo de la población, y tener legitimidad en sus futuras acciones políticas, y llegó el momento, el problema se puso color de hormiga, cuando se difundieron los audios de conversaciones entre las secretarias mencionadas y el presidente Vizcarra, que evidenciaba el acuerdo en el libreto para declarar ante la Fiscalía, que seguía las investigaciones sobre el caso de Richard Cisneros.
El actual presidente del Congreso Manuel Merino de Lama, congresista por AP, y Edgar Alarcón, congresista por UPP, aprovechando de las evidencias, quieren nuevamente retomar el control del gobierno y hacerse de más poder, en ese sentido, Manuel Merino de Lama, solicitó vacancia presidencial por incapacidad moral contra el presidente Martin Vizcarra.
No sabemos aún, si se consolida el golpe de Estado o aborta, en el transcurso de los días veremos las movidas en el tablero de ajedrez.
La coyuntura nos demuestra las contradicciones entre los sectores de derecha, se trataría de la guerra en las alturas por el control del poder. Las grandes mayorías no tenemos por qué solidarizarnos con el actual gobierno, ni tampoco apoyar al Congreso, porque la solidaridad es de clase, este gobierno y los anteriores fueron nefastos contra los intereses de las grandes mayorías, promulgaron leyes que liquidaron la estabilidad laboral, no se fomenta el empleo, más al contrario se profundiza la corrupción, que agrava la situación económica del ciudadano de a pie.
En estos momentos es necesario un partido del pueblo, lamentablemente no lo hay, sólo existen en la palestra los oportunistas que son los caviares o la falsa izquierda, tampoco existe la articulación sindical, por eso la derecha goza de buena salud, aun cuando se pelean entre ellos, mientras la clase trabajadora está huérfana de una organización política que dirija sus intereses.
Nuestra consigna debe ser democraticemos el trabajo, para ello no sólo debemos pensar en el cambio de la espuria Constitución, también propongamos la unidad sindical, el cambio de la sociedad peruana, a una sociedad que debe ser socialista, todos unidos, sin caviares y oportunistas.