Brigitte Mohnhaupt, ex integrante de la Fracción del Ejército Rojo (RAF), salió ayer de madrugada de la prisión bávara de Aichach tras pasar más de 24 años encarcelada. Otros tres miembros de esta organización armada, ya disuelta, están a la espera de ser puestos también en libertad.
Mohnhaupt, de 57 años, dejó la prisión de Aichach después de que el Tribunal de Stuttgart decidiera el pasado mes de febrero liberarla tras cumplir 24 años de las cinco cadenas perpetuas más quince años que le impusieron en 1985.
La ya ex presa estaba considerada como integrante, entre 1977 y 1982, de la cúpula de la RAF, la organización armada creada por Andreas Baader y Ulricke Meinhof. Ambos murieron en prisión en extrañas circunstancias.
Hasta ayer, Mohnhaupt era una de los cuatro últimos miembros de la RAF que quedaban en las cárceles alemanas, junto con Christian Klar (de 54 años), Eva Sybille Haule (de 52) y Birgit Hogefeld (de 50).
En las pasadas semanas, tras la decisión del Tribunal de Stuttgart, se habló de una posible puesta en libertad también de los restantes ex miembros de la RAF, que se autodisolvió como organización en 1998.
La puesta en libertad de Mohnhaupt fue decidida de acuerdo al procedimiento habitual, tras considerarse que «no supone peligro alguno para la sociedad». Asociaciones de víctimas de los atentados de la RAF mostraron su oposición a la liberación de Mohnhaupt.
Más complejo se presenta el caso de su compañero Klar, quien también lleva más de 24 años en la cárcel, por unas declaraciones en un mensaje dirigido a una conferencia del diario «Junge Welt».
En el mensaje, Klar manifestó su esperanza de que «concluyan los planes de derrotar al capital y se abra la puerta a otro futuro diferente», lo que desató las iras de los sectores alemanes abiertamente opuestos a su excarcelación.