Se cancela un proyecto que costó cuatro millones de euros y que pretendía ser un foro on-line de los políticos europeos
Myparl.eu, la red social para los parlamentarios europeos lanzada, con toda la parafernalia acostumbrada en Bruselas, el pasado verano, echa el cierre. Sin un anuncio oficial de razones, se cancela un proyecto que costó cuatro millones de euros y que pretendía ser un foro on-line de los políticos europeos.
La red social, que quería abrirse a los ciudadanos para que contactaran con sus representantes, se levantó con el objetivo de impulsar el debate comunitario de cara a las elecciones europeas del próximo año. Se dijo en su momento que trabajarían en ella coordinadores de los 27 países miembros. Hoy, que aún sigue en pie, sólo se han registrado tres parlamentarios de los 785 que componen la cámara.
Ya en su momento, el contrato con la empresa Mostra Communications fue muy criticado. El uso de herramientas de software libre en su diseño no parecía justificar un coste tan alto. Además, se preveía su traducción a los 23 idiomas representados en el Parlamento, pero sólo tiene páginas en inglés, francés y alemán. Además, el proyecto acabaría con las elecciones. Pero el mayor problema, además de la desidia de los parlamentarios, ha sido que el canal de participación de los ciudadanos jamás se abrió.