Tres mil islandeses se manifestaron contra la norma que permite al gobierno pagar indemnizaciones por la quiebra del banco Icesave a clientes extranjeros. Islandia aceptó pagar las 3.500 millones de euros como garantía de depósitos a los clientes británicos y holandeses del banco quebrado. Así, Islandia, fuertemente golpeada por la crisis financiera mundial y al […]
Tres mil islandeses se manifestaron contra la norma que permite al gobierno pagar indemnizaciones por la quiebra del banco Icesave a clientes extranjeros.
Islandia aceptó pagar las 3.500 millones de euros como garantía de depósitos a los clientes británicos y holandeses del banco quebrado.
Así, Islandia, fuertemente golpeada por la crisis financiera mundial y al borde de la bancarrota, podrá acceder a la ayuda que necesita con urgencia del Fondo Monetario Internacional y de otros países.
Los manifestantes se preguntan por qué tienen que pagar los fallidos de un banco privado. «En realidad este problema lo causan lo propietarios de este banco privatizado que han ingresado dinero en sus cuentas. Nuestro problema es que el gobierno islandés y los políticos quieren convertir el problema de los propietarios del banco en nuestro y de nuestros descendientes y no estamos de acuerdo. Todos protestamos por ello.»
«Estoy aquí para mostrar mi solidaridad y hacer que no se vote este acuerdo. Es vital que toda Islandia al tiempo rechace esto. Creo que el mundo sabe que estamos unidos y que esto no es justo».
La manifestasción se produce a dos días de que que se divulgara que el banco Kaupthing, el mayor de Islandia hasta su colapso por su mala gestión y la crisis financiera, concedió poco antes de derrumbarse créditos millonarios, en parte sin garantías, a grandes accionistas y a amigos de éstos.