Eric Woerth ha seguido el consejo del jefe del Estado y dejará a finales de mes su puesto de tesorero del partido presidencial, la UMP. Aunque el Gobierno intenta dar por cerrada la vertiente política del escándalo Bettencourt, nuevos documentos confirman que la heredera de L’Oréal contribuyó a financiar la campaña electoral de Nicolas Sarkozy. […]
Eric Woerth ha seguido el consejo del jefe del Estado y dejará a finales de mes su puesto de tesorero del partido presidencial, la UMP. Aunque el Gobierno intenta dar por cerrada la vertiente política del escándalo Bettencourt, nuevos documentos confirman que la heredera de L’Oréal contribuyó a financiar la campaña electoral de Nicolas Sarkozy.
Según una nota interna que publica Le Nouvel Observateur , los Bettencourt entregaron 30.000 euros a Eric Woerth en la sede parisina de la UMP en septiembre del 2006, unos meses antes de la elección presidencial. En la nota, calificada de confidencial, el administrador Patrice de Maistre aconseja a André Bettencourt que se los hagan llegar en cuatro cheques, dos firmados por él y los otros dos por su esposa, Liliane, para no sobrepasar el límite de las donaciones legales. Se cita concretamente el «acuerdo» de Eric Woerth y se habla de «Financiación UMP, NS», en clara alusión a las iniciales del aspirante al Elíseo.
Tras su anuncio de dimisión, los conservadores defienden a ultranza la honradez de Woerth. Para los socialistas, su decisión de cesar como tesorero del partido supone «la confesión de que había un problema». El informe exculpatorio de la Inspección General de Finanzas no neutraliza la acusación que mantiene la ex contable Claire Thibout: Eric Woerth habría recibido otros 150.000 euros de los Bettencourt para la campaña electoral de Sarkozy.
La jueza de Nanterre Isabelle Prevost-Desprez consiguió ayer que el Tribunal de Apelación de Versalles le diera la razón frente al fiscal Philippe Courroye y podrá investigar la denuncia que está en el origen del escándalo, la presentada por la única hija de los Bettencourt contra el amante de su madre, el fotógrafo François-Marie Banier, a quien acusa de aprovecharse de la fragilidad de la millonaria.
Banier no ha sido el único en beneficiarse de los generosos regalos de Liliane Bettencourt. El registro policial en la empresa de su administrador, sospechoso de fraude fiscal y evasión de capitales, ha revelado que el propio Patrice de Maistre recibió en el 2008 un donativo de cinco millones de euros.
http://www.lavozdegalicia.es/mundo/2010/07/14/0003_8609245.htm