El llamado de la Resistencia y de las centrales obreras a realizar un primer Paro Cívico Nacional desembocó en una masiva movilización, que volvió a plantear la urgente necesidad de dar respuestas concretas a las demandas del pueblo en resistencia «En Tegucigalpa la movilización fue un éxito total y en varias partes del país la […]
El llamado de la Resistencia y de las centrales obreras a realizar un primer Paro Cívico Nacional desembocó en una masiva movilización, que volvió a plantear la urgente necesidad de dar respuestas concretas a las demandas del pueblo en resistencia
«En Tegucigalpa la movilización fue un éxito total y en varias partes del país la gente se tomó puentes y carreteras, exigiendo respuestas a nuestras demandas», dijo a Sirel, el presidente del Sindicato de Trabajadores de la Industria de Bebidas y Similares (STIBYS), Carlos H. Reyes.
El Paro Cívico Nacional forma parte de una amplia agenda de movilizaciones que se desarrollarán a lo largo de los próximos meses, y que se espera puedan desembocar en una huelga general.
Entre las principales demandas de la población organizada destacan el aumento del salario mínimo, el rechazo a las leyes que pretenden legalizar el trabajo temporal y los contratos por horas y de media jornada, y la eliminación de la Ley de Inversión Público-Privada.
Asimismo, los participantes se solidarizaron con el Sindicato de Trabajadores de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (SITRAUNAH), cuyos miembros fueron brutalmente desalojados y detenidos por las fuerzas policiales el pasado 5 de septiembre.
La defensa del Decreto 18-2008, que trata de resolver el delicado tema de la mora agraria, y el rechazo a la privatización de los recursos hídricos para una supuesta producción de energía «limpia», fueron otras de las demandas planteadas durante la movilización nacional.
«Por el momento el gobierno se mantiene cerrado a nuestras demandas. Con respecto al salario mínimo está diciendo que el FMI le impuso no aumentar la masa salarial.
Siguen con el mismo chantaje de siempre -denunció Reyes-. Primero nos endeudaron y nos clavaron una deuda externa impagable, y después nos reventaron con las políticas neoliberales.
Ahora siguen chantajeándonos. Les quitan impuestos a los ricos y los aumentan a los pobres. Y nos dicen que no hay dinero para que los trabajadores y trabajadoras gocen de un salario y un trabajo digno», sentenció el también miembro del Comité Ejecutivo del Frente Nacional de Resistencia Popular (FNRP).
Movilización en todo el país
Además de la capital, donde una impresionante cantidad de personas se movilizó hacia Casa Presidencial, para después finalizar su marcha frente al Congreso Nacional, el Paro Cívico fue un éxito en San Pedro Sula, Choluteca, Copán, El Progreso, La Ceiba, Colón, Comayagua, Catacamas, Tela y Danlí.
Según reportaron varias fuentes, miles de trabajadores de la maquila y de la Resistencia de El Progreso se tomaron por más de seis horas el puente sobre la carretera que conduce hacia el litoral Atlántico.
En San Pedro Sula, miembros del FNRP se movilizaron por las calles de la ciudad y se tomaron el parque central.
Integrantes del Consejo Cívico de Organizaciones Populares e Indígenas de Honduras (COPINH) se movilizaron hacia la capital, «en unidad de acción al paro cívico, como un paso hacia la huelga general para derrumbar este modelo neoliberal, y dar pie a la refundación del país», se lee en un comunicado de esta organización.
¡MUCA presente!
En la zona del Bajo Aguán, Colón, la Resistencia se tomó el puente sobre el Río Aguán, paralizando el tráfico por varias horas. El Movimiento Unificado Campesino del Aguán (MUCA) participó masivamente a la movilización.
«Nos movilizamos con una gran cantidad de gente y, juntos con la Resistencia, los maestros y otros sectores, nos tomamos el puente por más de cinco horas -dijo Juan Chinchilla, miembro de la comisión negociadora del MUCA y del Comité Ejecutivo del FNRP-.
Fue una acción exitosa y aprovechamos para exigir al gobierno el respeto de los acuerdos, el cese de la represión y la no derogación del Decreto 18-2008″, explicó a Sirel.
Para el 15 de septiembre está prevista una nueva movilización, durante la cual se llevará a cabo el conteo final de las firmas de la Declaración Soberana, para la autoconvocación a una Asamblea Constituyente.
Hasta la fecha son ya más de un millón las firmas recolectadas en todo el país.
Fuente: http://www.rel-uita.org/