En una sentencia emitida hoy, y sorprendente por su argumentación, el Consejo de Estado griego antepuso las exigencias de los acreedores extranjeros a la legislación nacional y justificó los despidos en las universidades estatales como una medida de interés público. El máximo tribunal administrativo del país rechazó la demanda presentada por la Junta de Rectores […]
En una sentencia emitida hoy, y sorprendente por su argumentación, el Consejo de Estado griego antepuso las exigencias de los acreedores extranjeros a la legislación nacional y justificó los despidos en las universidades estatales como una medida de interés público. El máximo tribunal administrativo del país rechazó la demanda presentada por la Junta de Rectores de las universidades públicas en la que se pedía la derogación de la medida por la que se eliminarían mil 349 plazas de personal administrativo, por ser contraria a la constitución y a las leyes griegas.
La norma decretada por el gobierno reduciría las plantillas en cerca de un 40 por ciento, lo que para los gestores de las instituciones afectadas haría imposible el desempeño de las tareas a las que se deben.
El Consejo de Estado consideró sin embargo que los despidos están en consonancia con las obligaciones a las que se compromete el país en virtud de su préstamo y del memorando de austeridad firmado con los acreedores.
Por tal razón, estableció que la medida no podía ser suspendida en bien del interés público, que para el tribunal parece corresponderse con el estricto cumplimiento de las políticas de ajuste exigidas al país.
Opinión contraria defienden los trabajadores que, en el caso de las dos universidades de Atenas, alcanzaron su décima semana de huelga en defensa de sus puestos de trabajo y de la educación pública, y que se enfrentan a otras sentencias de rango menor que declararon la protesta como ilegal.
Argumentan que las universidades quedarán con un empleado por cada 78 estudiantes, mientras que en las británicas, por ejemplo, este ratio es de 12,5.
A su vez el claustro universitario decidió hoy abandonar la huelga y reanudar la enseñanza el próximo 19 de noviembre, y pidió lo mismo al personal no docente para poder retomar la actividad con normalidad en el campus.