Artículos
Pese al coro de autoridades políticas y financieras que afirma que el sistema es fuerte y que las regulaciones funcionan, la sociedad global se asienta sobre una bomba de relojería a punto de estallar.
La agenda energética impulsada por la UE es un fiel indicador de su desempeño general en los últimos años: se azuza la espiral belicista, se desarrollan estrategias erráticas y se une la suerte del continente a los intereses privados de las empresas transnacionales, en un marco de creciente autoritarismo y conflictividad.
La guerra en Ucrania abre la caja de los truenos de la tormenta perfecta y provoca la mutación de la agenda política del capitalismo verde y digital en una versión más belicista y autoritaria.
“Vulneraciones de los derechos humanos de los migrantes en Canarias”; “Denunciadas 480 muertes de migrantes en una semana, tratando de alcanzar Canarias”; “El plan del gobierno convierte a Canarias en otro tapón migratorio similar a Lesbos”; “Carrera contrarreloj para construir los macro-campamentos de inmigrantes en Canarias”; “La Dignidad de Canarias, la vergüenza de Europa”.
Las alianzas público-privadas, la captura de nuevos mercados, las alfombras rojas para atraer capital que especula y/o desahucia, el rescate público de empresas privadas, así como el blindaje político-jurídico de los intereses corporativos vía tratados comerciales siguen siendo las prioridades de los diferentes gobiernos de turno.
Las finanzas hegemonizan en la actualidad el desarrollo capitalista y suponen el principal paradigma de la globalización. En concreto, una tipología específica de generación de dinero y crédito acumula un poder sin parangón: las «finanzas en la sombra». Superado el enfoque tradicional de banca, cimentada sobre beneficios obtenidos en función del diferencial de tipos de […]
El capitalismo carece de centro operativo. No existe un mando unificado, un espacio desde el que se decidan nítidamente agendas, políticas y relatos en la defensa de sus valores e intereses. Siendo esto cierto, también lo es que más allá de una estructura de poder compleja y bien engrasada a escala global, de inercias civilizatorias […]
El capitalismo carece de centro operativo. No existe un mando unificado, un espacio desde el que se decidan nítidamente agendas, políticas y relatos en la defensa de sus valores e intereses. Siendo esto cierto, también lo es que más allá de una estructura de poder compleja y bien engrasada a escala global, de inercias civilizatorias […]