Traducido para Rebelión por Juan Alba Martínez
Queridos estudiantes facinerosos (1):
Soy vuestra amada ministra Gelmini (2) . Tras el cinco en conducta y el maestro único, tengo una idea nueva que hará revivir la escuela italiana. ¿Donde empieza la instrucción? En la guardería. Es justo ahí donde hay que intervenir, para que los niños se vuelvan obedientes y sumisos al deber. Los cuentos, con su fantasía y su gran derroche de personajes, los alejan del realismo y el conformismo debidos y alimentan el peligro de andarse por las ramas, la corrupción moral, la droga y la arrogancia revoltosa. De manera que por ley impongo el monstruo único. Estará prohibido leer historias que contengan más de un monstruo o un malvado, con el consiguiente aumento del gasto publico, y sobre todo habrá que subrayar siempre la naturaleza perversa, facinerosa y vetero-comunista del monstruo.
Según el D.M.U. (Decreto del Monstruo Único) estarán prohibidos Blancanieves y los siete enanitos, porque la madrastra y la bruja son un caro e inútil desdoblamiento de personalidad nocivo para la imaginación de los jóvenes alumnos. Por no hablar de la ambigua convivencia de Blancanieves y los siete pequeños obreros, entre ellos Gruñón, que probablemente pertenece a la CGIL (3) . Se admite Caperucita Roja, pero se deberá subrayar que el cazador es evidentemente de la Liga Norte y el lobo de origen transilvano y rumano. Prohibido Alí Babá y los 40 ladrones; basta con uno solo. Abolido Peter Pan, demasiados piratas que gravan el presupuesto del Estado. Abolido Pinocho: incluso si se fundiesen en un solo cuerpo el gato y el zorro quedarían el vilipendio a los carabinieri y la clara referencia a Mediaset (4) en el País de los Juguetes. Permitido Pulgarcito, pero deberá llamarse Pulgarzote (5) y medir 1,70 para no constituir una burla a nuestro amado presidente del gobierno. Prohibidos Hansel y Gretel, porque los monstruos son dos, la madre y la bruja, y además se habla demasiado de crisis económica. Prohibido El Patito Feo; si uno es feo, lo es por causas genéticas y lo seguirá siendo para siempre. Además, Andersen era gay. Prohibido igualmente El Gato con Botas por su contenido sadomaso. Prohibida, o más bien prohibidísima, La Cenicienta. Las malas son tres y todas se parecen a mí. Es decir, a vuestra ministra superficial, inculta y charlatana. Pero al fin y al cabo vuestra Ministra Única.
Notas:
1. «Facinerosos» fue el término que empleó Berlusconi para referirse a los estudiantes que protestaban contra las reformas de la ministra Gelmini.
2. Ministra de Educación del gobierno Berlusconi que da nombre al controvertido decreto-ley de reforma de la enseñanza, uno de cuyos puntos establece un maestro único, excepto para inglés y religión, en la escuela primaria.
3. Confederación General Italiana del Trabajo, el sindicato más antiguo y representativo de Italia.
4. El imperio mediático de Berlusconi.
5. En italiano se distingue entre pollice (pulgar de la mano) y alluce (pulgar del pie). Benni opone Pollicino (Pulgarcito) a Allucione (Pulgarzote -del pie).
Stefano Benni (Bolonia 1947) es uno de los escritores vivos más populares en Italia. Escribe para el diario comunista Il manifesto y muchos otros medios italianos. Desde 1999 dirige un ciclo internacional de jazz y es uno de los fundadores de la Pluriversidad de la imaginación, que funcionó en la asociación «Italo Calvino» de Bolonia y ahora es una escuela itinerante de teatro y lectura en voz alta. Sus libros ¡Tierra!, Baol, La compañía de los celestinos, Aquiles, pies ligeros (2003) (novelas), El bar del fondo del mar (cuentos) y Los maravillos animales de Extrañalandia han sido traducidos al castellano.
Fuente:
http://www.ilmanifesto.it/Quotidiano-archivio/31-Ottobre-2008/art7.html
http://www.stefanobenni.it