El Parlamento Europeo ha aprobado hoy en una votación a mano alzada una resolución pactada previamente por todos los grupos políticos, en la que condena «con firmeza» los incidentes violentos registrados en el campamento de Gdeim Izik y en la ciudad de El Aaiún, pero no censura explícitamente la actuación del Gobierno de Marruecos. El […]
El Parlamento Europeo ha aprobado hoy en una votación a mano alzada una resolución pactada previamente por todos los grupos políticos, en la que condena «con firmeza» los incidentes violentos registrados en el campamento de Gdeim Izik y en la ciudad de El Aaiún, pero no censura explícitamente la actuación del Gobierno de Marruecos.
El texto aprobado, que rebaja las críticas a Marruecos que planteaban algunas fuerzas políticas, deplora «la pérdida de vidas humanas y expresa su solidaridad a las familias de las víctimas heridos y desaparecidos», al tiempo que hace un llamamiento a las dos partes a «mantener la calma y a abstenerse de más violencia».
La Eurocámara «toma nota de la apertura de una comisión de investigación del Parlamento marroquí para arrojar luz sobre el desarrollo de los hechos», pero considera que las «Naciones Unidas serían la instancia más adecuada para llevar a cabo un investigación internacional que esclarezca los sucesos, las muertes y las desapariciones».
Los eurodiputados «lamentan los ataques a la libertad de prensa e información que sufrieron muchos periodistas europeos» y «deplora» la prohibición de entrada al Sahara Occidental que sufrieron prensa y diputados europeos.
En este sentido, «demanda al Reino de Marruecos que permita el libre acceso y movimiento en el Sahara Occidental a la prensa, los observadores independientes y las organizaciones humanitarias».
Los parlamentarios piden a la ONU un mecanismo de protección de los derechos humanos en el Sahara y expresan su «preocupación» por las detenciones y agresiones a defensores saharauis de los derechos humanos.
El ministro de Exteriores de Marruecos, Taieb Fassi Fihri, y representantes saharauis comparecerán el próximo 1 de diciembre en la comisisón de Exteriores del Parlamento Europeo para ofrecer su versión de los hechos.