Por lo menos una persona muerta es el saldo de víctimas que deja la represión policial en la manifestación que miles de mineros artesanales de la región selvática peruana Madre de Dios iniciaron este domingo en rechazo al decreto gubernamental que persigue ordenar la minería aurífera informal de la zona. Los huelgistas bloquearon la carretera […]
Por lo menos una persona muerta es el saldo de víctimas que deja la represión policial en la manifestación que miles de mineros artesanales de la región selvática peruana Madre de Dios iniciaron este domingo en rechazo al decreto gubernamental que persigue ordenar la minería aurífera informal de la zona.
Los huelgistas bloquearon la carretera Panamericana Sur para impedir el paso de vehículos.
La represión de la Policía peruana contra una manifestación de mineros en la sureña región de Arequipa este domingo dejó saldo de al menos un muerto, según reconoció el primer ministro de ese país suramericano, Javier Velásquez, pese a que los líderes de la protesta señalan que son tres las víctimas mortales producto de la acción policial.
La muerte reportada por Velásquez ocurrió mientras la Policía intentaba dispersar la manifestación que, en rechazo de un decreto gubernamental, comenzaron este domingo mineros en la selvática localidad peruana de Madre de Dios (sureste).
«Lo que podemos confirmar, sí ya nos han llegado los reportes, hay un civil fallecido y vamos a hacer la investigación correspondiente», expresó Velásquez.
Según los líderes de la protesta, rechazan un decreto emitido por el presidente peruano, Álan García, que consideran que pretende ordenar la minería aurífera informal en esta zona de la nación.
El director de Defensa de la Federación Nacional de Mineros Artesanales del Perú (FNMAP), Rafael Seminario, declaró que por lo menos tres eran los muertos y cinco los heridos, no obstante, la información no ha sido oficializada.
La huelga de mineros se inició a las 00:00 horas locales (05:00 GMT) con cuatro mil manifestantes, aproximadamente, según información de los medios locales.
Según reportes locales, la protesta inició con la quema de cauchos y el bloqueo de la carretera Panamericana Sur, a la altura del kilómetro 650, lo cual impidió que por lo menos cien vehículos transitaran por esta vía.
Gran cantidad de piquetes dispuestos por los huelguista bloqueron el paso de la localidad de Apurímac, en el sur del país.
Los mineros comenzaron a desplazarse desde el pasado sábado en camiones hacia Puerto Maldonado, capital de Madre de Dios, provenientes de los sectores de Guacamayo, Delta 1 y Huepetuhe, todas poblaciones del sur peruano.
La prensa peruana además reportó que el Gobierno sostiene que los mineros en huelga recaudaron unos 20 kilos de oro, con valor de 600 mil dólares, para financiar sus gastos mientras dure la protesta.
El paro fue convocado por la Federación Nacional de Mineros Artesanales del Perú y la Federación Minera de Madre de Dios con la intención de protestar en contra del Decreto de Urgencia 012-2010 que afectará, según sus estimaciones, las regiones del sur del país, en las cuales laboran una gran cantidad de mineros informales.
El decreto estatal que rechazan los mineros establece una zona de exclusión en la región selvática de Madre de Dios, además de plantear una etapa de formalización para evitar el daño ambiental que produce el uso de dragas y mercurio.
Con la finalidad de evitar el caos, el Gobierno peruano decretó estado de emergencia en siete provincias del departamento de Ica (suroeste), Madre de Dios y Arequipa (ambas en el sureste) durante 60 días, así como también, autorizó a las fuerzas de seguridad a actuar contra cualquier protesta.
La minería artesanal peruana se enfoca en la extraccción de oro, principalmente en las zonas surestes del país como Madre de Dios y Puno.
Esta indutria produce un aproximado de 20 toneladas de oro; emplea un estimado de 40 mil personas y deja ganancias por unos 600 millones de dólares anuales.
Esta protesta, en la que ya ha muerto por lo menos una persona por la acción represiva de la Policía peruana , ocurre a poco menos de 10 meses de haberse producido la masacre de Bagua, en la Amazonia peruana, cuando en una acción similar efectivos policiales arremetieron contra una protesta indígena.
Cerca de 65 etnias de la Amazonia impulsaron una protesta desde abril hasta mediados de junio de 2009, con bloqueos de rutas y ríos, y tomas de instalaciones petroleras, para conseguir la derogación de decretos que consideraban eran únicamente para viabilizar el Tratado de Libre Comercio (TLC) de Perú con Estados Unidos.
A comienzos de junio del pasado año, una represión policial contra la protesta indígena en Bagua dejó una cifra de más de 40 personas muertas y un número aún no determinado de desaparecidos.
Los reglamentos que rechazaban las etnias amazónicas eran los proyecto de la Ley Forestal y de Fauna Silvestre y de la Ley de Recursos Hídricos.