Los alborotadores gemelos Kaczynski han logrado que el resto de los europeos estén pendientes de sus elecciones. En contra del criterio de 26 de sus 27 miembros, la UE no celebrará el Día contra la Pena de Muerte el 10 de octubre por la cercanía de los comicios polacos. En la reunión de ministros de […]
Los alborotadores gemelos Kaczynski han logrado que el resto de los europeos estén pendientes de sus elecciones. En contra del criterio de 26 de sus 27 miembros, la UE no celebrará el Día contra la Pena de Muerte el 10 de octubre por la cercanía de los comicios polacos.
En la reunión de ministros de Justicia e Interior de los Veintisiete, Polonia impidió ayer la creación de esta fecha simbólica como parte de la campaña contra la pena capital que la UE pretendía lanzar en Naciones Unidas. Los polacos quieren que se debata la petición «en un contexto más amplio» sobre el derecho a la vida para introducir su oposición al aborto y la eutanasia, asuntos electorales para su grupo de extrema derecha, partidario de la pena capital en algunos casos.
«La idea de establecer un Día Europeo contra la Pena de Muerte ha aparecido de pronto. Nos gustaría discutir lo que significa realmente… Pero no queremos un debate sobre la reinstauración de la pena de muerte», aseguró el ministro polaco de Interior, Wladyslaw Stasiak.
Los representantes comunitarios describen con «frialdad» y «estupor» el último bloqueo polaco. «Se está mandando un mensaje negativo y se está debilitando el intento de la UE para conseguir una resolución de la ONU contra la pena de muerte en el mundo», explica un diplomático español.
Italia, cuyo Gobierno empezó la campaña, es el país más molesto con la actitud polaca. A principios de mes, su ministro de Exteriores, Massimo D’Alema, lamentó la «mentalidad retrógrada» de los Kaczynski y un portavoz de Varsovia acusó al italiano de «comunista». «Ya hace 13 años que vemos como fracasa la iniciativa europea por falta de valor», se quejaba ayer la ministra de asuntos comunitarios Emma Bonino.
El titular español de Justicia, Mariano Fernández Bermejo, comentó que hasta que no cambien «las circunstancias políticas» -con la celebración de elecciones en Polonia o incluso la derrota de los gemelos ultraconservadores en el poder-, no se volverá a plantear la celebración de la jornada. Según él, la resistencia polaca puede ser «transitoria». En la intervención ante sus colegas, Bermejo recordó que, si se amplía la discusión, se podría comenzar un debate sinfín sobre la manipulación genética, la guerra, la siniestralidad laboral o los accidentes de tráfico.
En plena campaña electoral polaca, centrada, para los Kaczynski, en su programa «antiaborto» y «profamilia», la UE se resigna así a aparcar la jornada. «Ahora es muy difícil. Es un momento muy sensible políticamente para Polonia, hay un evento significativo en pocas semanas», admitió Franco Frattini, comisario de Justicia.
Portugal, que preside la UE este semestre, también teme que ese «evento» altere su calendario para firmar el nuevo Tratado de los Veintisiete en Lisboa. La reunión para que los jefes de Estado y de Gobierno acepten el texto definitivo está prevista el 18 y 19 de octubre, horas antes de la votación polaca, aunque los gemelos podrían renunciar a jugar la baza antieuropea frente a una opinión pública euroentusiasta.
Los ministros tuvieron, en cambio, menos problemas para el nombramiento de un nuevo coordinador antiterrorista por la dimisión, en marzo, del holandés Gijs De Vries. Tras las altas expectativas del cargo nacido después del 11-M y el encontronazo con la realidad de que la UE no tiene competencias en la lucha contra el terrorismo, los Veintisiete quieren ahora dejar claro que el elegido tendrá una misión «técnica», es decir de bajo perfil. Participará en conferencias internacionales, recabará información de los Estados miembros y coordinará los distintos grupos que tocan el crimen terrorista en Bruselas, pero no reaccionará a atentados ni se encargará de que se comparta información policial. El elegido por Javier Solana, según varias fuentes, será el funcionario comunitario belga Gilles de Kerchove.