Recomiendo:
0

Las excusas de Blair

Fuentes: Rebelión

Al hablar de que Irak no es una excusa válida para justificar los atentados terroristas en Londres, Blair, dice ahora sólo una parte de la verdad, y es la que le conviene, por supuesto. Y digo ahora, porque como ya sabemos, Lord Blair ha mentido antes total y descaradamente. Cumpliendo bien ahora su papel de […]

Al hablar de que Irak no es una excusa válida para justificar los atentados terroristas en Londres, Blair, dice ahora sólo una parte de la verdad, y es la que le conviene, por supuesto.

Y digo ahora, porque como ya sabemos, Lord Blair ha mentido antes total y descaradamente. Cumpliendo bien ahora su papel de dolorido jefe de gobierno, aunque quizás ya él sabía que podía pasar, trata de evitar que cada día más gente se pregunte si las cosas llegaron a este punto por Irak y por el ánimo personal del jefe del gobierno británico de acompañar en aquella aventura a su amigo Bush.

Es cierto, nada justifica la matanza de civiles inocentes. El terrorismo es condenable desde cualquier ángulo. No hay terrorismo malo ni terrorismo bueno. Pero ¿ Acaso es creíble que estos hechos no son el resultado de la intervención británica en la invasión a Irak ?. Una invasión ilegal, violatoria del derecho internacional, y de los propios derechos humanos de todo un pueblo, condenada por casi toda la humanidad, incluida buena parte de la población británica, y además, declarada ilegal por la propia ONU, a la que Blair desconoció al sumarse a su socio Bush en la cruzada contra Saddam Hussein y sus supuestas armas de destrucción masiva que podía desplegar en ¨45 minutos¨ como dijera el propio Primer Ministro británico.

La verdad es obvia. Blair intenta esconder tras sus palabras, que Irak no es una excusa. Es una causa. Una de las tantas causas, a la que pueden sumarse, si de ellas se trata, Afganistán, Palestina y otros lugares. Detrás de los atentados están los vejámenes que las tropas británicas han cometido en Irak torturando, maltratando, asesinando, a ciudadanos iraquíes. Evidentemente, para algunos musulmanes, tales humillaciones son causa más que suficiente para derivar a la posición más extrema de la reacción a tales hechos. Aunque el Ministerio de Defensa británico haga en cada caso un mea culpa, una investigación y un juicio.

Y luego, para rematar, las excusas por el asesinato extrajudicial del brasileño Menezes. Ahora resulta que cuando la policía balea 8 veces a un desconocido, se debe a las grandes presiones que sufren estos últimos. Son comprensibles todas las presiones que sufren quiénes se responsabilizan por la seguridad de otros, pero cuesta trabajo creer que no existían otros métodos de detener a un hombre.

Aunque, no lo dudo, cualquiera se echaría a correr si detrás tuyo varios hombres vestidos de civil te dan el alto y te persiguen sin identificación policial visible alguna. Muchos testigos señalan, a juzgar por la oficial BBC, que no escucharon a los policías identificarse. Como pueden ser sinceras las disculpas del gobierno británico cuando luego, a renglón seguido, se felicita a la policía por las acciones que realiza.

Soy cubano. Mi país ha sufrido decenas de atentados terroristas donde han muerto muchas personas. En la mayoría de los casos los terroristas han sido capturados y puestos a disposición de la justicia.

Otros han logrado escapar gracias a la ayuda de sus mentores estadounidenses y gozan de cómodo refugio en Miami (Como Orlando Bosch, uno de los autores intelectuales de la voladura del avión cubano en Barbados, el 6 de octubre de 1976) y otros esperan en también cómodas cárceles, estadounidenses por cierto, que pase el tiempo, la gente olvide y puedan entrar a Estados Unidos con visa (Posada Carriles, el otro autor intelectual del mismo hecho mencionado anteriormente).

Pero en ninguno de los casos, nunca un civil fue baleado a mansalva por la policía cubana mientras se trataba de prevenir nuevos atentados terroristas. Y la policía cubana es también tercermundista en cuanto a recursos técnicos se refiere, a diferencia de los enormes recursos técnicos de que disponen las fuerzas de seguridad del primer mundo.

Personalmente, no sé porque la frase de Blair que cita Europa Press «los terroristas siempre buscarán excusas para justificar sus acciones» me recuerda tanto las propias acciones de Blair y Bush en Irak, donde han mentido desde el principio. Y donde continúan mintiendo, sin saber, sencillamente como salir del atolladero. Un atolladero que ahora se le ha extendido a su propia casa al Primer Ministro inglés.