Cientos de miles de portugueses tomaron hoy las calles de Lisboa para pedir la dimisión del Gobierno conservador, ante la recesión y el desempleo que vive el país en medio de las políticas de recortes que afectan a la población. Convocados por la Confederación General de Trabajadores de Portugal, el mayor sindicato luso, los manifestantes […]
Cientos de miles de portugueses tomaron hoy las calles de Lisboa para pedir la dimisión del Gobierno conservador, ante la recesión y el desempleo que vive el país en medio de las políticas de recortes que afectan a la población. Convocados por la Confederación General de Trabajadores de Portugal, el mayor sindicato luso, los manifestantes partieron de varias concentraciones en barrios de la capital y se reunieron frente a la sede de la Presidencia, en el Palacio de Belém.
El secretario general de la agrupación sindical, Armenio Carlos, estuvo al frente de la protesta que reunió a trabajadores con las banderas rojas de la organización de cerca de 600 mil afiliados, así como miembros de sindicatos de funcionarios públicos.
«Que se vaya el gobierno», «Cambiar la política» o «Elecciones ya», eran algunos de los lemas que gritaron los participantes en la plaza en Lisboa.
La aplicación de rigurosos planes de recortes del Ejecutivo de Pedro Passos Coelho, como parte del programa pactado con la Unión Europea en 2011 para el otorgamiento de un rescate de 78 mil millones de euros, despertaron numerosas muestras de descontento popular en el país de 10 millones 600 mil habitantes
El malestar social se intensificó a principios de mes, cuando el primer ministro anunció un nuevo plan de ajuste que prevé la extensión de la edad de jubilación, de 65 a 66 años, la eliminación de 30 mil empleos públicos y la extensión del tiempo de trabajo semanal, que pasará de 35 a 40 horas.
De acuerdo con Carlos, estas medidas hipotecan el futuro del país y convierten en un infierno las vidas de trabajadores, pensionistas y jóvenes sin perspectivas de empleo.
En un discurso pronunciado durante la manifestación, el líder sindical criticó además al presidente portugués, Aníbal Cavaco Silva, por considerarlo corresponsable de las políticas del Gobierno.
Condenó el respaldo de Cavaco a Passos Coelho tras el fallo del Tribunal Constitucional, que anuló varios de los recortes aprobados en el último presupuesto del Estado, y lo llamó a salvar a los portugueses antes de a la coalición gubernamental.
El líder de la Confederación General de Trabajadores de Portugal aprovechó la convocatoria para anunciar una nueva protesta 30 de mayo, previa a la huelga de la administración prevista para junio.
También asistieron a la marcha dirigentes políticos como Jerónimo Sousa, del Partido Comunista Portugués, y Joao Semedo, coordinador del Bloque de Izquierdas.
Una encuesta difundida por medios locales lusos arrojó que el 57 por ciento de los ciudadanos espera una convocatoria a elecciones legislativas anticipadas.
Fuente: http://www.prensa-latina.cu/index.php?option=com_content&task=view&idioma=1&id=1448801&Itemid=1