Al permitir mítines y desfiles, la sociedad debe protegerse contra el radicalismo, afirmó el presidente ruso, Vladimir Putin, al anunciar la firma de la ley que a partir de hoy regula el desarrollo de manifestaciones públicas. El instrumento legal entra en vigor este sábado a partir de su publicación en el diario oficioso Rossiyskaya gazeta, […]
Al permitir mítines y desfiles, la sociedad debe protegerse contra el radicalismo, afirmó el presidente ruso, Vladimir Putin, al anunciar la firma de la ley que a partir de hoy regula el desarrollo de manifestaciones públicas.
El instrumento legal entra en vigor este sábado a partir de su publicación en el diario oficioso Rossiyskaya gazeta, comentó el estadista desde San Petersburgo durante una conferencia dedicada al sistema judicial del país más extenso del planeta.
La nueva regulación prevé un recrudecimiento de las sanciones contra los organizadores y participantes en protestas y manifestaciones no autorizadas.
Aprobada anteriormente por las dos cámaras del parlamento federal, la normativa no estipula castigos más drásticos que los practicados en Europa, comentó enfático el mandatario.
Putin admitió que en el futuro podrían realizarse enmiendas en el texto si las circunstancias plantean esa necesidad.
Medios de prensa rusos resaltan que la ley multiplica en más de 10 veces el monto de las multas para los infractores, prohíbe enmascararse durante las protestas y organizar acciones no autorizadas en forma de «paseos colectivos» que afecten el orden público.
Coinciden esas publicaciones en que la primera «prueba de fuego» de la nueva regulación será el 12 de junio, fecha seleccionada por diversos grupos opositores para llevar a cabo una segunda edición de la llamada Marcha de los millones.
Bajo esta denominación tuvo lugar una protesta el 6 de mayo, a raíz de la elección como presidente de Putin, la cual concluyó en enfrentamientos entre manifestantes y policías, con un saldo de decenas de heridos y más de 400 detenidos.
En un artículo publicado recientemente en RIA Novosti, el periodista Ricardo Zedano comparó estos hechos con los acontecimientos que condujeron al derrumbe y desintegración de la Unión Soviética.
«Fue una aventura protagonizada precisamente por jóvenes, igual a los de ahora, también ebrios de «democracia y libertad, que no tenían siquiera una idea del futuro que les esperaba cuando optaron por el cambio de un sistema por otro que desconocían», escribió.
Zedano recuerda que al igual que una generación anterior, sin darse cuenta, los jóvenes actuales corren el riesgo de convertirse en instrumentos de intereses ajenos para desestabilizar a Rusia.
El periodista advierte que en sus dos primeros mandatos, Putin recuperó la autoestima de la ciudadanía rusa, perdida durante el Gobierno de Boris Yeltsin.
Pero crítica que en esa etapa se hizo poco por alertar y proteger a la juventud contra formas de penetración más sutiles como la moda, la música, el cine, la televisión y el reclutamiento mediante becas para cursar estudios superiores.
Con esos métodos destruyen la identidad y la cultura de muchos pueblos, concluye el periodista de RIA Novosti.
ocs/jpm
Fuente: http://www.prensa-latina.cu/index.php?option=com_content&task=view&id=514987&Itemid=1