Unos treinta curdos iraquíes fueron deportados por el aeropuerto de Landvetter en Gotemburgo, en lo que sería la mayor deportación masiva de la historia sueca. Según reportes de activistas por el derecho de asilo, se trataría de una acción conjunta de las autoridades de Suecia y Noruega con el fin de «bajar los costos» de […]
Unos treinta curdos iraquíes fueron deportados por el aeropuerto de Landvetter en Gotemburgo, en lo que sería la mayor deportación masiva de la historia sueca. Según reportes de activistas por el derecho de asilo, se trataría de una acción conjunta de las autoridades de Suecia y Noruega con el fin de «bajar los costos» de la deportación usando aviones expresamente fletados.
La web de la revista antiracista MANA publicó esta mañana, citando como fuente a activistas por el derecho al asilo, la noticia de que unos treina curdos iraquíes habrían sido transladados del centro de retención de Kållered en Gotemburgo hacia el aeropuerto a eso de las 5 de la mañana.
Según los activistas, la policía desplegó considerables recursos para efectuar la operación:
«Estuvimos en el centro de retención de la Dirección de Migración desde las 4 de la mañana pero ellos [la policía] nos vencieron. El operativo policial fué masivo y sobredimensionado con 60 policías, ambulancia, personal paramédico y 10 microbuses», escribieron los activistas que agregaron que las protestas continuarían en el aeropuerto de Landvetter.
Otros activistas agregaron más tarde en un correo electrónico que uno de sus compañeros informó haber sido amenazado de muerte por uno de los policías. «¡Mira que te puedo encajar un tiro cuando se me antoje!» le dijo un agente a uno de los activistas.
También agregaron que hubieron miembros del cuerpo represivo que dieron señas de no desear participar en la deportación masiva de los curdos. Dos agentes se fueron a parar a cierta distancia del resto y estaban llorando, según los activistas.
Los curdos deportados corren serios riesgos de tortura, ejecuciones u otras represalias a su regreso al ocupado norte de Irak.
Las deportaciones masivas violan el principio del tratamiento de los casos migratorios individualmente. En el pasado, la movilización de grupos humanitarios y antiracistas en Suecia ha impedido las deportaciones masivas de palestinos sin estado y de afganos.