El ciudadano oriental fue golpeado e insultado por de un grupo de 7 menores de edad italianos de entre 14 y 17 años en un barrio popular, según lo informaron fuentes de la alcaldía de la capital. La agresión contra el chino se suma a una serie de episodios racistas registrados en las últimas semanas […]
El ciudadano oriental fue golpeado e insultado por de un grupo de 7 menores de edad italianos de entre 14 y 17 años en un barrio popular, según lo informaron fuentes de la alcaldía de la capital.
La agresión contra el chino se suma a una serie de episodios racistas registrados en las últimas semanas en varias ciudades de Italia.
El chino, que estaba esperando el autobús, fue rodeado por un grupo de unos cinco menores italianos en el barrio periférico de Tor Bella Monaca, donde sufrió una paliza que lo dejó con la nariz rota, moretones y heridas en el rostro.
Según un testimonio, los agresores lo insultaban gritándole «chino de mierda».
Un agresor fue identificado como uno de los miembros de la banda de adolescentes que participaron el pasado lunes 29 de septiembre a otra agresión racista contra dos africanos.
El chino, de unos treinta años, que al parecer no habla italiano, fue atendido inmediatamente por la guardia médica y la policía.
«Los culpables serán ejemplarmente castigados», anunció el alcalde de derecha de la capital, Gianni Alemanno.
Para su predecesor y actual líder del Partido Democrático de izquierda, Walter Veltroni, es necesario «combatir el clima de intolerancia y violencia» que reina en la ciudad.
El gobierno de derecha de Silvio Berlusconi adoptó una serie de medidas contra la inmigración, lo que ha generado un clima de intolerancia en toda la península.
La organización humanitaria Amnistía Internacional (AI) denunció en mayo pasado «una ola de racismo» contra los inmigrantes en Italia, en violación de las «normas internacionales sobre derechos humanos», durante la presentación del informe anual de la organización.
«Nos enfrentamos ahora a una ola de racismo que concierne a todos los inmigrantes presentes sobre el territorio italiano, tanto los que está en regla como los clandestinos», denunció en rueda de prensa Daniela Carboni, responsable de Amnistía Italia.