Recomiendo:
0

UE (Alemania)-Ucrania-EEUU

Una conversación entre poderosos y la lección de Zbigniew Brzezinski

Fuentes: Rebelión

Da cuenta de esa conversación Marc Bassets [1] en un artículo sobre Ucrania, UE y Estados Unidos publicado en El País que vuelve a confundir Europa con una parte de ella (Rusia, por ejemplo, ¿no es parte de Europa?) Las conversaciones con Teltschik y Scowcroft, veteranos cold warriors, combatientes de la guerra fría, señala MB, […]

Da cuenta de esa conversación Marc Bassets [1] en un artículo sobre Ucrania, UE y Estados Unidos publicado en El País que vuelve a confundir Europa con una parte de ella (Rusia, por ejemplo, ¿no es parte de Europa?)

Las conversaciones con Teltschik y Scowcroft, veteranos cold warriors, combatientes de la guerra fría, señala MB, «se desarrollaron en los pasillos del Atlantic Council, un laboratorio de ideas de Washington, donde se celebraba un foro sobre EE UU y Europa». John Kerry describió la inestabilidad en Ucrania como «una llamada de alarma» para reforzar la alianza transatlántica -¡vale, será eso!- y, tras dos décadas ocupada en misiones de paz -¡vale, también es esto!- y guerras en países fuera de su territorio natural -¿su territorio natural?- «reavivar la misión primigenia de la OTAN: defender las fronteras de los países miembros». ¡Temblemos todos! ¡Más huracanes de acero se perciben en la cercanía! ¡Que suenen todas las alarmas!

Sea como fuere, no es este el punto-horror de esa nota. Es el siguiente:

Zbigniew Brzezinski, «que con Scowcroft es uno de los últimos sabios (¡sabios!)», en opinión del periodista del global-imperial, de la política exterior norteamericana «aconseja a Obama ir un paso por delante de la UE». Cree que «los europeos» acabarán siguiéndole. Manda quien manda.

En el Atlantic Council, Mister Brzezinski, el ex consejero de seguridad nacional con Jimmy Carter de origen polaco, el que preparó, abonó y diseñó el inmenso (y brutal) error de la Unión Soviética en Afganistán, recordó una reciente y significativa conversación entre Robert Zoellick, el ex del Mundial, y un ejecutivo, de nombre «desconocido», de Siemens, la del pasado nazi-oscuro-más-que-oscuro, la misma multinacional alemana que ha llegado a recientes acuerdos con el departament d’Ensenyament del gobierno catalán sobre asuntos de formación dual.

La conversación acaso sea falsa o parcialmente inventada pero puede representar otras conversaciones:

«Esto es terrible. Acabamos de estar en Moscú y tenemos intereses importantes en Rusia», dijo el ejecutivo en cuestión tras escuchar una diatriba contra Putin.

«Lo que usted dice es interesante», le respondió Zoellick, ex presidente del Banco Mundial. Preguntó a continuación: «¿Qué porcentaje de sus ventas globales y acuerdos son con Rusia?»

«Un 2%», respondió el ejecutivo-Siemens.

«¿Y cuánto con nosotros [con Estados Unidos]?», preguntó de nuevo Robert Zoellick,.

«Un 20%» respondió el ejecutivo-Siemens.

¿Entonces? Se hizo el silencio en la sala de la conversación.

Z. Brzezinski, en el Atlantic Council, añadió: «Todo el mundo había entendido el mensaje. Es recomendable aprender a calcular cuáles son tus intereses».

¿Está claro entonces cuáles son sus intereses? ¿Está claro lo que para algunos se juega en Ucrania? ¿Está claro de qué pasta están hechos los poderosos del mundo, sean estos alemanes, ingleses, usamericanos o españoles y también rusos y ucranianos por supuesto?

Nota:

[1] Marc Bassets, «Los titubeos europeos en Ucrania impacientan a Estados Unidos.» El País, 2 de mayo de 2014, pp. 4-5.

Salvador López Arnal es nieto del obrero cenetista oscense asesinado en el Camp de Bota de Barcelona en mayo de 1939 -delito: «rebelión»- José Arnal Cerezuela.

Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.