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El plan «Frankenstein»

Fuentes: Radio Nederland

Los sindicatos europeos califican de ‘monstruo de Frankenstein’ la propuesta del ex comisario europeo Frits Bolkestein, sobre la apertura del mercado europeo para profesiones en el sector de servicios públicos. Este fin de semana, organizan manifestaciones de protesta en Bruselas

Los partidarios del controvertido plan del ex comisario europeo, Frits Bolkestein, lo califican, por su parte, de revolucionario. Entre tanto, la iniciativa tendente a liberalizar el sector de servicios ha provocado fuertes discusiones, y los debates se producen tanto en el seno de la Comisión Europea como entre parlamentarios y sindicatos. Pese a que la propuesta tiene serias repercusiones para la economía del continente, todo indica que el público aún no es consciente de ello.

Según el plan, los profesionales del sector de los servicios, desde médicos hasta fontaneros, podrán trabajar en todo el territorio de la Unión Europea. En consecuencia, fontaneros de Polonia podrán establecerse libremente en Holanda, y farmacéuticos holandeses en Polonia. Las palabras mágicas del plan son ‘país de origen’. Es decir, que los obreros polacos del sector de la construcción que trabajan en Holanda, deberán acogerse a las condiciones laborales (horarios, sueldos, etc.) de su ‘país de origen’.

Actualmente, un empleado debe observar los reglamentos del país donde trabaja. En razón de este principio, particulares y empresas del sector de servicios en Europa no se han establecido fuera de su país de origen. Desde hace años, las empresas medianas y pequeñas se quejan de la enorme cantidad de tiempo y dinero que se requiere para ofrecer servicios en el extranjero, por ejemplo, para la traducción y el estudio de las incontables normas burocráticas. En muchos casos, las empresas holandesas deben cumplir reglamentos más rígidos que las locales.

Por esa razón, la europarlamentaria Sophie in t Veld, del partido Demócratas-66, alaba el plan de Bolkestein. A su juicio, el sector de servicios constituye el 60 por ciento de la economía holandesa. Y, puesto que en los demás terrenos el mercado ya se ha abierto, la liberación de este sector contribuirá al crecimiento de la economía, precisa la europarlamentaria. Además, Según la Oficina Central de Planificación de Holanda, el plan Bolkestein creará en Europa 60.000 nuevos puestos de trabajo, entre otras cosas, gracias al incremento de la exportación.

Si bien el plan parece excelente, sus detractores temen que, con ‘el monstruo de Frankenstein, se cree el fantasma del dumping social, ocasionando la desintegración de las leyes sociales. Uno de los oponentes, Auke Blauwbroek, del sindicato holandés FNV, advierte que los empresarios se establecerán en países donde paguen menos impuestos y contribuciones a las previsiones sociales.

Además, los adversarios del plan no sólo temen un éxodo de empresas de Europa occidental al Este, sino también una afluencia de mano de obra barata de Europa del Este a Occidente. Es muy posible que el fontanero polaco ofrezca sus servicios en Holanda a precios muy inferiores, lo que significará la ruina para su colega holandés.