Las inversiones suecas en América Latina llevan al hostigamiento y  desplazamiento forzado de los pueblos indígenas de esta región. Suecia y  los fondos de pensiones suecas deben intervenir frente a los abusos de  las compañías mineras hacia los pueblos indígenas. Esto escriben  Solidaridad Suecia América Latina y la Coordinadora Andina de  Organizaciones Indígenas (CAOI) en el Día Internacional de los Pueblos  Indígenas.
Recientemente Gustavo Ulcués del pueblo Nasa de Colombia visitó Suecia,  donde denunció que 34 pueblos indígenas de Colombia han sido  erradicados y otros 30 pueblos corren el mismo peligro. Las empresas  mineras en Colombia son una amenaza real para los pueblos indígenas que  han sido acosados hasta el desplazamiento forzado de sus territorios. BHP Billiton, Anglo American, Ashanti AngIogold y Glencore International son las empresas principales que tienen sus operaciones en Colombia y en las cuales hay grandes inversiones de los fondos de pensiones suecos.
En el Perú, cinco personas murieron en julio por las protestas contra la empresa minera Newmont  Mining, cuyo proyecto en Cajamarca secaría cuatro lagunas. La población  defiende las lagunas con su vida porque sabe que su supervivencia  depende del acceso al agua limpia, algo que la empresa no respeta. Los fondos de pensiones han invertido 67 millones de dólares en Newmont Mining.
En el departamento de San Marcos, en Guatemala,  los pueblos Mayas han luchado durante años para que la empresa  canadiense Goldcorp abandone sus territorios. Aunque la Comisión  Interamericana de Derechos Humanos ha pedido al Estado de Guatemala que  cierre la mina, los fondos de pensiones no han vendido el dinero que  invirtió en Goldcorp.
Estos ejemplos no son excepciones. Los fondos de pensiones  invierten en compañías como BHP Billiton, Ashanti AngIogold,  Buenaventura, Freeport- McMoran, Anglo American, Glencore International,  Newmont Mining, Goldcorp, Barrick Gold, HudBay, Rio Tinto y Xstrata.  Estas empresas son expertas en vender su marca y en la gestión de la RSE  y han obtenido varios premios ambientales. Pero también están  relacionadas con el desplazamiento forzado, asesinatos, hostigamiento,  intimidación, soborno, destrucción de los ecosistemas, contaminación del  agua y la contaminación del medio ambiente en general. Ninguna de estas empresas respeta los derechos territoriales de los pueblos indígenas.
En el marco del Día Internacional de los Pueblos Indígenas, recordamos que hace un año Ban Ki Moon  pidió a todos los Estados miembros de la ONU tomar medidas para apoyar a  los pueblos indígenas en su lucha contra la marginación, la pobreza y  el despojo de tierras y sus recursos. ¿Qué medidas ha tomado el gobierno  sueco?
En los últimos veinte años, los derechos indígenas han  sido reconocidos en varios tratados y declaraciones internacionales,  uno de ellos es la Declaración de las Naciones Unidas de los pueblos  indígenas del 2007, donde el derecho al territorio es fundamental. La  razón de esto es que la identidad de los pueblos indígenas está  fuertemente vinculada al territorio. La pérdida de su territorio  significaría perder su cultura. Sin embargo, esto derechos están en  conflicto con las empresas y las inversiones de los fondos de pensiones  suecos, debido a que en las tierras indígenas hay minerales valiosos.
Los  inversionistas tienen mucho poder. Con esto, viene también una  responsabilidad. ¿Los fondos de pensiones reconocerán este problema y  abrirán los ojos contra los abusos de las empresas mineras hacia los  pueblos indígenas?
Un problema de fondo es que los fondos de pensiones se rigen por directrices y según estos, los beneficios económicos son superiores a los derechos humanos.  Mientras esto continúe, las inversiones en empresas mineras  cuestionables van a continuar. Por lo tanto, nos dirigimos al grupo  político del parlamento sobre los fondos de pensiones para exigirles que  las directrices éticas de los fondos de pensiones sean reescritos para  garantizar que las inversiones en empresas mineras respeten los derechos  humanos y los derechos indígenas.