Aunque es muy vieja y sabida, repasemos la lección de la historia reciente. Todos recuerdan que la Doctrina de la Seguridad Nacional fue el eje de la estrategia político-militar de los EEUU para la «guerra fría». Se dividió el mundo en dos familias ideológicas y se calificaba de comunistas a todos los que no hincaban […]
Aunque es muy vieja y sabida, repasemos la lección de la historia reciente. Todos recuerdan que la Doctrina de la Seguridad Nacional fue el eje de la estrategia político-militar de los EEUU para la «guerra fría». Se dividió el mundo en dos familias ideológicas y se calificaba de comunistas a todos los que no hincaban la rodilla ante las barras y las estrellas. La CIA asesinaba dirigentes políticos por ser culpables de actitudes dignas e independientes en defensa de sus pueblos. Por determinismo geográfico, los EEUU creyeron que América La Pobre era su patio trasero y, por consiguiente, le aplicaron la doctrina en forma particularmente severa. Si los gobiernos se sometían sin chistar al destino manifiesto de América La Rica todo marchaba sobre rieles, pero apenas cantaba un gallo, le daban el golpe de Estado, por supuesto, con la finalidad de preservar la democracia, la libertad y la seguridad nacional.
Para ahorrarse los sinsabores que acarrea invadir países ö financiar «contras», el Pentágono creó la Escuela de las Américas en la Zona del Canal de Panamá, centro de adoctrinamiento donde se formaron 60.000 oficiales en las técnicas del golpe de Estado, del asesinato y de la tortura, convirtiéndolos así en instrumentos de seguridad nacional de los EEUU. En definitiva les salía más barato pagar viajes y placeres a los milicos «sudacas» que intervenir directamente como en Irak y Afganistán. De la escuelita egresaron con felicitaciones varios reverendos hijos de puta como el chileno Manuel Contreras y el peruano Vladimir Montesinos. En 1972 se graduó con honores Roberto D’Aubuisson que luego asesinó a monseñor Oscar Romero, el padre de los pobres en El Salvador. Algunos siguen en actividad en pleno siglo XXI como Romeo Vázquez Velázquez, quien aplicando lo aprendido en dos cursos realizados en 1976 y 1984 secuestró a Manuel Zelaya presidente legítimo de Honduras, crimen contra el pueblo que se realizó con el apoyo político del gobierno estadounidense. También lucían diplomas de la Escuela los oficiales que en el 2003 casi logran derrocar a Hugo Chávez en Venezuela. Decenas de «cóndores» uruguayos se recibieron de verdugos profesionales en la Escuela (algunos de ellos continúan activos): entre otros Antranic Ohannessian, Iván Paulós, Abdón Raimúndez, Maurente, el «gordo» Calcagno, Tomás Casella, Miguel Dalmao (asesino de Nibya), Armando Méndez (hijo), Eduardo «Llamarada» Ferro, Purtscher, Pedro Barneix y Pedro Aguerre, actual comandante en jefe del ejército.
Los conquistadores españoles fueron los primeros hipócritas en ensangrentar un continente entero mientras predicaban el cristianismo biblia en mano. Siglos después, imitando la doble moral de los Pizarro y los Cortés, los estadounidenses, tan creativos ellos, decían preocuparse por el subdesarrollo de América La Pobre y en el marco de la Alianza para el Progreso, enviaban asesores para «ayudar» al desarrollo de los pueblos que no podían salir de la pobreza. Era el «método Mitrione», la «ayuda» era, en realidad, entrenar policías y militares en las técnicas más modernas de contra insurgencia, al tiempo que los educaban en la Doctrina de la Seguridad Nacional y en los des-valores morales necesarios para practicar el terrorismo de Estado en nombre de la paz y la democracia. La opinión pública estadounidense creía a pies juntillas que eran unos malagradecidos esos latinos que gritaban a voz de cuello «yankees go home».
La acción cívica o ayuda humanitaria es también una vía «pacífica» integrada a la estrategia de control y dominio de América La Pobre. Con un discurso que habla de solidaridad y generoso desinterés, el Pentágono financia donaciones y obras benéficas -como la Políclinica que construyeron acá en Santa Catalina- con el fin de despertar simpatías en la población que se proponen dominar. La beneficiencia ha sido también un vehículo para infiltrar las instituciones de gobierno y parlamentarias, no sólo mediante las treinta monedas, sino también por el prestigio que proporciona el aparecer como intermediarios de los Reyes Magos.
Sin embargo, los EEUU no pueden confiar ciegamente en nadie, ni en milicos que obedecen al imperio, ni en los dictadores que colocan en el poder. De ahí que para controlar América La Pobre mantengan a IV Flota en el Caribe y a sus cuarenta y siete bases militares distrbuídas por todo el continente. Más allá de la elocuencia, de las promesas de solidaridad y de los juramentos de mutua fidelidad, la verdad verdadera está en esa telaraña de espionaje satelital, comunicaciones cibernéticas y, por las dudas, de sofisticadas armas que apuntan contra los pueblos.
El camino para instalar una base yanqui en Uruguay
Febrero del 2011. Al mismo tiempo que Frank Mora, de Departamento de Defensa de los EEUU, se reunía con Luis Rosadilla, ministro de Defensa de Uruguay, en la orilla norte del Río Negro, departamento de Tacuarembó, se realizaban ejercicios militares conjuntos del Escuadrón Aéreo No.5 de Helicópteros de la Fuerza Aérea Uruguaya con el Escuadrón 902 de Rescate de la Fuerza Aérea de los Estados Unidos. Rosadilla sostuvo que para el Uruguay -y, por consiguiente, para el Frente Amplio- era de importancia estratégica el diálogo con los EEUU en materia de defensa de los países de la región. ¿Desconoce la larga historia política de los EEUU en América La Pobre, tachonada de crímenes y genocido?; ¿desconoce los golpes de ciego que actualmente está dando ese imperio en su decadencia senil? En el parlamento no se levantó ni una sola voz para criticar el disparate de Luis Rosadilla. No hubo un sólo frenteamplista que le preguntara a «su gobierno» que diablos tiene que ver el Pentágono con la defensa del territorio nacional uruguayo. El globo sonda lanzado por Rosadilla indicó que se podían preparar los pasos futuros.
9 de mayo del 2012. Palacio Legislativo, Senado de la República. Después de aprobada por la cámara de diputados, el cuerpo de los senadores de la república votó la ley que autoriza el ingreso a territorio nacional de personal de la Armada estadounidense y el armamento militar que necesiten. Entre el 15 de mayo y el 15 de junio los uruguayos estamos teniendo el honor de ser «visitados» por un equipo de entrenamiento militar de las Fuerzas Especiales-SEALs integrado por 15 oficiales y soldados. Por supuesto que estos modernísimos «rambos» no viene con malas intenciones, no, por favor, pueblo frenteamplista, no vayáis a pensar eso, se los autorizó simplemente para que enseñen a la Armada Nacional, corrompida hasta los huesos, «a mantener el control funcional del mar». No ha trascendido que alguno de los parlamentarios frenteamplistas se hay sentido impulsado a seguir el ejemplo de Guillermo Chifflet. Ninguno de ellos tiene la dignidad suficiente para decir NO a esta verdadera intromisión de las fuerzas armadas estadounidenses… ¿cuántas veces la izquierda denunció la actividad de los «asesores» yanquis en todo el mundo? Las técnicas militares no son «imparciales» sino que, por el contrario, cuando se enseña a disparar fusiles también se indica hacia dónde apuntarlos.
18 de mayo de 2012. Avenida Italia y Abacú. Por intermedio del comandante en jefe del ejército, general Aguerre, el gobierno de Mujica rindió homenaje a los cuatro soldados caídos en 1972 en una operación del MLN(T) que entonces integraba el propio Mujica. Es preciso recalcar: hasta este año había sido un acto organizado por las gremiales de retirados militares para reivindicar la legitimidad del terrorismo de Estado, ahora fue un acto oficial cuyos detalles organizativos estuvieron decididos por el presidente de la república y el ministro de defensa. El general Aguerre expresó que el ejército no tiene enemigos dentro de fronteras y que el Uruguay, por ser un país pequeño, no tiene que tener enemigos. Sus expresiones abren varios interrogantes porque, si no hay enemigos… ¿qué sentido tienen las fuerzas armadas?, ¿porqué no las disuelven?, ¿para qué se un millón de dólares por día?, ¿para qué se compran más armas, helicópteros y tanques para las fuerzas armadas? ¿para qué viene los SEALs como instructores?
En el momento preciso que irrumpen los SEALs en el escenario político del Río de la Plata, las palabras de Aguerre cayeron como un bálsamo adormecedor, «ahora somos todos buenos, nos abrazamos y nos besamos». Las falsas promesas a todos quedan contentos y satisfechos, dispuestos a olvidar y perdonar, cuando por detrás del escenario se cuelan los SEALs y con ellos la fuerza política que no gobierna y se está adhiriendo al poder militar más criminal de la historia humana y, paradójicamente, creando la posibilidad de más terrorismo de Estado, más crímenes de lesa humanidad, más delirio. Las palabras de Aguerre son parte de una estrategia, su objetivo es aparecer como candorosos angelitos mientras los «rambos» entran por la puerta trasera. Ya no es la UNITAS ni la MINUTASH, ahora son los SEALs, no es preciso extenderse sobre sus «hazañas» porque todos saben de ellos a través de películas y jueguitos de la play station.
Después de esto qué?… pues, no se precisa un bola de cristal: «uruguayas y uruguayos ,hay una base yanqui en vuestro futuro no muy lejano». Desde que Vázquez los llamó para que «ayuden» en una guerra contra Argentina, van haciendo el camino con el andar, será culebrero pero es un camino.
Anestesiados
En una presentada en un seminario realizado este mes de mayo en Ciudad México, el compañero Walter Martínez, recordó la postura aprobada por el V Congreso del Frente Amplio en el año 2008: «Nuestro país deberá participar en el Consejo Sudamericano de Defensa, creado en ese ámbito. Significa un gran avance y deberá constituirse en un foro de consulta y debate sobre los temas de Defensa, que sirva para mantener a nuestro continente como zona de paz. Se buscará la elaboración de una doctrina sudamericana que favorezca el mando civil sobre las cuestiones de Seguridad y Defensa. En consecuencia, no participaremos en actividades convocadas por el Comando Sur u otras agencias y organismos de EU. Cabe asimismo reafirmar el rechazo a la presencia de la IV Flota de los EU en las aguas de Nuestra América«.
Los codos parlamentarios ya borraron el postulado programático del Frente. Los senadores y los diputados que aprobaron la ley que permite el ingreso de los SEALs, contradijeron indudablemente el programa que prometieron respetar, todos ellos, desde Astori a Topolansky, pasando por Agazzi, Xavier, Rubio, Couriel y Constanza Moreira quebraron la legalidad de su fuerza política. No hubo debate en las cámaras ni en los medios de comunicación, los parlamentarios se enardecen discutiendo sobre la criminalidad adolescente pero guardan un vergonzoso y vergonzante silencio sobre la ley que abre las puertas al imperio. No hubo un solo Guillermo Chifflet que tuviera la dignidad de oponerse a la indignidad entreguista de la ley aprobada … ¿las bases frenteamplistas exigirán que «sus» parlamentarios les rindan cuentan de estos actos?
¿Es que los EEUU han cambiado su destino manifiesto porque unos ex-guerrilleros gobiernan el Uruguay? ¿Es que ahora vienen a ayudarnos a defender la nación y vivir pacíficamente? No se lo puede creer ni Fernández Huidobro, que fue capaz de argumentar que es antimperialismo enviar tropas uruguayas a controlar al pueblo haitiano. No existe ninguna razón para descartar la amenaza que supone la estrategia de poder de los EEUU en América La Pobre. El peligro yanqui podrá parecer lejano mirado desde esta orilla del Plata gobernada por ex-antimperialistas, pero la agresión de los EEUU es la realidad cotidiana en Honduras desde el golpe a Manuel Zelaya, en México y en Colombia donde los EEUU intervienen directamente y en Cuba que sigue bloqueada y excluída. La violencia armada que comanda el presidente de los EEUU es el enemigo real de los pueblos latinoamericanos. Los ejércitos de América La Pobre, pertenezcan a países grandes o pequeños, tienen un evidente y único enemigo: los Estados Unidos de América La Rica, las armas latinoamericanas deberían apuntar a defenderse de su agresividad, de sus guerras preventivas, de su apetito por los recursos que la naturaleza puso en manos de nuestros pueblos. La tesis de guerra al narcotráfico, al contrabando o a la violencia adolescente son simples supercherías que ocultan el propósito verdadero: acatar las imposiciones del venido a menos gran imperio.
Hay que crear la subjetividad necesaria para que la gente acepte las donaciones del Comando Sur como si fueran inocentes, para que crean que las maniobras conjuntas no tienen un fin ulterior y para que reciban de brazos abiertos los invasores SEALs. Anestesiar la sensibilidad de las bases militantes es la condición previa a la instalación de una base de los EEUU, entonces, cuando los caminantes caminen a oscuras, al final del empedrado aparecerá el infierno. Madres y Familiares de Detenidos Desaparecidos son la reserva de dignidad que nos va quedando… nos vemos esta noche entre la muchedumbre que marcha todos los 20 de mayo.
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