Abderrahman Buhaia

Artículos

Acaba noviembre. En este undécimo mes del año, hay dos efemérides marcadas a fuego –literalmente y nunca mejor dicho– en la historia reciente del Sahara Occidental. Son dos viernes que, en la medida de cada uno, constituyen un punto y aparte en la historia de esta franja de desierto quemada por el sol y la aridez –en su levante– y bañada por las olas del Atlántico –en su poniente–.

Los aullidos de las hienas del Majzén, así como los aullidos de las hienas que tiene diseminadas por el mundo, no nos intimidan, sabemos que aúllan para distraer a los demás de la grave crisis política, económica y social, en la que El Majzén está inmerso.

En las entrañas del Majzén, los estrategas del servicio secreto se esmeran en conseguir los mejores resultados de su maquinaria de propaganda. Mientras, el presidente Sánchez, en lugar de condenar los crímenes contra la población saharaui, alienta y encubre al régimen que los comete.