Artículos
La reflexión sobre la contribución de Marx a una perspectiva ecológica ha progresado mucho en las últimas décadas. La imagen un tanto caricaturesca de un Marx “prometeico”, productivista, indiferente a los retos medioambientales, transmitida por algunos ecologistas, ansiosos de “sustituir el paradigma rojo por el verde”, ha perdido mucha credibilidad.
Todos somos pasajeros de un nuevo Titanic. Sin embargo, a diferencia del Titanic de 1912, los oficiales y la mayoría de los pasajeros de este hermoso transatlántico lo saben. Saben que si el nuevo Titanic sigue su rumbo actual, chocará inevitablemente contra un iceberg y se hundirá. El iceberg se llama Cambio Climático. Algunos de los agentes preguntaron por un cambio de rumbo. «Demasiado caro» fue la respuesta: habría que compensar a los pasajeros, etc., en resumen, un gran gasto. Sin embargo, se adoptó una resolución para reducir la velocidad, pero apenas se aplicó. Mientras tanto, en la lujosa clase Business, la orquesta toca y los pasajeros bailan. En la clase turista, la gente sigue con pasión el campeonato de fútbol por televisión.
El ecosocialismo y el movimiento por el decrecimiento figuran entre las corrientes más importantes de la izquierda ecologista. Los ecosocialistas admiten que es necesario cierto grado de decrecimiento de la producción y el consumo a fin de evitar el colapso medioambiental.