Estimado José María Sanz (Loquillo): El día 20 de febrero, la ciudadanía será consultada sobre una Constitución Europea, que nuestro presidente ya firmó sin consultarnos y sin pedirnos opinión. Yo entiendo, que la Constitución Europea será la madre de toda legislación futura en el territorio de la Unión Europea, y por lo tanto, me indigna […]
Estimado José María Sanz (Loquillo):
El día 20 de febrero, la ciudadanía será consultada sobre una Constitución Europea, que nuestro presidente ya firmó sin consultarnos y sin pedirnos opinión. Yo entiendo, que la Constitución Europea será la madre de toda legislación futura en el territorio de la Unión Europea, y por lo tanto, me indigna que el referéndum para aceptarla o refutarla, sea únicamente consultivo y no vinculante.
Quiero decirle también, que esta Constitución Europea no fue creada a través de una Asamblea Constituyente, lo que ya de por si, deja «castrado» este proceso. Fue un «grupo de sabios», los que elaboraron un tratado con más de cuatrocientas páginas llenas de complicados artículos, de las cuales, sólo nos entregaron menos de la mitad a través de los periódicos dominicales.
Desde un principio, sabían que poca gente tendría el tiempo y la voluntad de leer, analizar y cuestionar el texto. Esta situación favorecía las opciones del SI, porque en su sano juicio y bien informado/a, ningún/a trabajador/a, agricultor/a, autónomo/a, parado/a, pacifista, ecologista, feminista, etc… votaría por una constitución que apuntala e institucionaliza el neoliberalismo y erosiona numerosos derechos conseguidos a través de muchos años de luchas.
En este escenario, el siguiente paso está consistiendo en crear opinión en el electorado y alentarlo para votar favorablemente. Para conseguirlo, se está evitando cualquier atisbo de debate neutral. La información en los grandes medios está siendo parcializada y sesgada, maquillando y transformando una Constitución regresiva socialmente, en la panacea necesaria para alcanzar la paz, la democracia y el bienestar. Se está aplicando la táctica del miedo, que tan buenos resultados le ha dado a George Bush, en la celebre, triste y mal denominada guerra contra el terrorismo. Aquí en España, la zozobra nacional pasa por no apoyar clara y mayoritariamente la Constitución. Fíjese como en ambos casos, las consecuencias del acobardamiento sugestiona a las masas, que permanecen inmutables ante la reducción de sus derechos y espacios de libertad.
A través de impecables campañas publicitarias (algunas financiadas con fondos públicos1), numerosos partidos, sindicatos, organizaciones y personalidades (como usted); están condicionando la opinión de la ciudadanía hacia un mismo fin. Y esto es grave Loquillo, pues clara y conscientemente se está sustituyendo el debate y la información, por la manipulación y la fe ciega. La mayoría de gente no basará su voto en el contenido de la Constitución, sino en la confianza que depositan en ciertas instituciones y rostros como el suyo.
Déjeme hacerle ya la primera pregunta ¿Cuán enferma está una democracia que para crear una Constitución, elimina la participación social en la elaboración, el poder de decisión en las urnas y el debate plural y equitativo en la información?
Quiero decirle, que he averiguado algo de su pasado y algunas cosas me han dejado perplejo. Vivió en un barrio que usted califica de revolucionario, junto a un padre que fue estibador y carabinero republicano2. Además participó en la grabación de la banda sonora del documental «Mujeres en pie de Guerra», donde aparecen canciones como «Durruti» o «A las barricadas» entre otras3. Ha representado el papel del típico rockero malo e incorrecto, llegando a calificar de «momias del pasado»4, a ciertos partidos políticos con los que ahora comparte su pasión europeísta. También interpretó canciones pacifistas5 y defendió posturas antimilitares públicamente.
Sobre esto último particularmente, observe el artículo I-41 de su Constitución, en donde puede leer que los países miembros destinarán «capacidades civiles y militares» y crearán la Agencia Europea de Defensa «…para identificar las necesidades operativas, fomentar medidas para satisfacerlas, contribuir a identificar y, en su caso, a aplicar cualquier medida oportuna para reforzar la base industrial y tecnológica del sector de la defensa,…». En el apartado 8, se le confiere al Parlamento Europeo una función meramente consultiva, en política común de seguridad y defensa. Curiosa Constitución, la que reduce drásticamente las competencias del único órgano elegido directamente por el pueblo.
En ese mismo artículo, se da el espaldarazo definitivo y se reconocen las «guerras preventivas», «el fortalecimiento de la seguridad internacional» y las misiones que tengan como objetivo el «mantenimiento de la paz». De esta forma, la Constitución Europea legitimaría una barbarie, como la que viene sufriendo el pueblo afgano en manos del petro-imperio norteamericano. ¿No es todo esto un poco indigesto para su pasado antimilitarista? ¿Me puedo fiar de su «SI a la Constitución», cuando me demuestra ser tan políticamente inestable?
Aunque bien es cierto Loquillo, que debería esperar cualquier cosa de una persona que quiere un camión para ser feliz. Ahora ya podrá comprárselo y viajar por las carreteras europeas, observando los campos desiertos de agricultores/as y repletos de transgénicos, fábricas contaminantes con obreros más precarios, el medio ambiente arrasado y por el cielo, algún que otro avión de la OTAN, dispuesto a dejar caer bombas de racimo, sobre la niñez de cualquier país que tenga petróleo, diamantes o cualquier otro interés deseado por los buitres que elaboraron su Constitución Europea.
Dígame en el próximo concierto en el que actúe, cómo mirará a los ojos de sus fans. Algunos/as son inmigrantes no comunitarios, a los que su Constitución no garantiza plenos derechos; trabajadores/as a los/as que no se les garantiza el trabajo; mujeres a las que no se les garantiza la igualdad; estudiantes a los que no se les garantiza la educación universitaria gratuita; consumidores/as a los/as que no se les garantiza su protección; ciudadanos/as a los/as que no se les garantizan servicios públicos de calidad y antimilitaristas a los que no se les garantiza la paz.
Quiero decirle para finalizar, que mi felicidad, por el contrario, pasa por levantarme cada día y poder soñar y luchar por un mundo mejor. Al observar a personajes como usted, más me alegro de ser un desconocido trabajador idealista, de ser lo que soy y lo que no soy. Salud y larga vida al rock’n’roll.
1 Para más información sobre la desigual distribución de recursos económicos, se puede leer el artículo «Los Euros del SI», en http://www.rebelion.org/noticia.php?id=10874
2 http://www.zonadeobras.com/libros/textos/loquillo_cap1.asp
3 http://www.pce.es/foroporlamemoria/noticias/2004/pop_04102004.htm
4 http://www.xtec.es/~jducros/Loquillo.html
5 http://canales.diariovasco.com/dvorame/220403/musica/musin007.htm