
En febrero de 2016, observando los inquietantes acontecimientos que se sucedían a mi alrededor, durante el gobierno del bizarro y moderado Rajoy, escribí un artículo para Diagonal, titulado «Llamadlo fascismo, ya está aquí…», que concluía de este modo:
… «Es el fascismo, que, como se ha anunciado ya, como lo han anunciado otros antes que yo, ya está aquí… Un fascismo nuevo, quizás, en las formas: subrepticio y difuso, unas veces, chirriante y escandaloso, otras; pero, en realidad, antiguo en sus causas y en sus consecuencias terroríficas y deshumanizadoras. Avisados llevamos hace tiempo y avisados quedamos. Quizás tengamos que volver a tomar las calles de nuevo, antes de que sea demasiado tarde, y vengan a por (todos) nosotros.»