Urariano Mota | 
Presentación de Las manos que acarician también pueden destruir

Salvador López Arnal | 
Un pequeño mapa conceptual para no perdernos del todo

Miguel Candioti | 

Oni Acosta Llerena | 

La República de Platón y los Guaraníes de José Manuel Peramás

Jesús Aller | 

Durante el siglo XVII, la selva que riegan el Paraná y el Uruguay vio a los indios guaraníes levantar pueblos de arenisca roja hermosos y austeros para que les sirvieran de morada.

Entrevista a Margarita Maldonado Colón, escritora, editora e investigadora puertorriqueña

Wilkins Román Samot | 

Entrevista a Nicolás González Varela sobre Friedrich Engels y la edición de Engels antes de Marx

Salvador López Arnal | 

Nicolás González Varela Estudió Filosofía en la Universidad de Buenos Aires, donde ejerció como Profesor en Ciencias Políticas y de Extensión Universitaria. Ensayista en revistas como Babel, Crisis, El Viejo Topo, Polvo, en los diarios Perfil y La Nación de Buenos Aires. Asimismo fue editor en editoriales como Folios, EUDEBA y Manantial, tradujo un amplio campo de autores (Heidegger, Graves, Engels, Marx, Pessoa, entre otros). Muchos de sus materiales circulan gratuitamente por la red, desde temas filosóficos, políticos e históricos a ensayos sobre cine y fútbol. Entre sus publicaciones destacadas, tenemos dos extensos libros, Nietzsche contra la democracia. El pensamiento político de Friedrich Nietzsche (1862-1872) y Heidegger. Nazismo y política del ser, ambos publicados por Montesinos. También tradujo y estuvo a cargo del cuidado de edición del Cuaderno Spinoza y Cuaderno sobre el suicidio ambos inéditos de Marx en español y una antología de textos políticos inéditos de Fernando Pessoa Fernando Pessoa: Política y Profecía. Escritos políticos 1919-1935.

Una de las figuras de la filosofía y literatura universal que han repercutido en mi gusto e interés intelectual es Simone de Beauvoir, su imagen junto a Jean-Paul Sartre, delinea un ideal que confieso exalta mis deseos por la comprensión de la condición humana, especialmente, gracias a ese espíritu libertario y antimoralista que la caracterizó.