Christian Arias Barona | 

Tras la victoria del Pacto Histórico en las elecciones presidenciales del 29 de mayo, quedó un escenario de asombro y tensión.

Daniel Martínez Cunill | 

La elección se dio en medio de una profunda polarización por el descontento social derivado de la inequidad, la pobreza y la urgente necesidad de retomar el camino de la paz.

FARC- EP. | 

La realidad colombiana es absolutamente lo contrario de lo que pregonan el gobierno y los usufructuarios del poder político y económico: el desempleo crece al igual que la precariedad salarial y la pobreza.

Mateo Gutiérrez León | 

«Parece ser que lo criminal no es lanzar bombas contra niños, sino protestar contra esas bombas. Lo criminal no es condenar a millones de personas al hambre; lo criminal es combatirlo. Lo criminal no son el terror y la tortura del estado, sino defenderse de eso” -Ulrike Mainhoff

Pablo Jofré Leal | 

La oligarquía colombiana que ha gobernado, por décadas en Colombia, sin apenas contrapesos, ha contado con el apoyo irrestricto de los gobiernos estadounidenses, para ejecutar esta hegemonía de la derecha política, económica y militar del país del norte, que ha tenido con Iván Duque el último de los actores proestadounidenses.

El cambio parece ser el marco cognitivo más importante en una campaña electoral.

Uno de los desafíos de la centroizquierda es revertir el histórico desinterés y el abstencionismo en las elecciones.

La distinción entre lo social y lo político en el ejercicio del poder se rompió en la coyuntura electoral, por mandato de la ciudadanía, que dejó de creer en las jerarquías de los partidos.

Petro sigue con un margen muy amplio y la remontada será espectacular.