
El trasvase de simpatías de un partido a otro no es fascistización sobrevenida, sino coherencia. Muchos españoles de moral conservadora hallaron en el proyecto de Felipe González la continuación del tardofranquismo.
El trasvase de simpatías de un partido a otro no es fascistización sobrevenida, sino coherencia. Muchos españoles de moral conservadora hallaron en el proyecto de Felipe González la continuación del tardofranquismo.
La Perona fue un enorme barrio de barracas, formado en la dura posguerra española, que tomó ese nombre de la visita de Eva Perón a Barcelona.
El pasado 18 de abril, la revista semanal estadounidense The New Yorker, en base a un estudio realizado por el laboratorio interdisciplinario de la Universidad de Toronto, Citizen Lab, publicó que más de 65 políticos de las formaciones EH Bildu, ERC, Junts, PDeCat y CUP, además de activistas, periodistas y abogados, han sido espiados por el sistema Pegasus, el cual solo puede ser utilizado por los servicios de inteligencia del gobierno del Estado español.
Los medios de comunicación que censuran degradan la democracia.
Fue un 4 de febrero de 1937, en plena guerra, cuando la Gaceta de la República publicaba el Decreto del Ministerio de Justicia que reconocía la igualdad de derechos civiles para ambos géneros.
Antes de la pandemia, multitud de centros escolares ya se habían entregado con fervor a los planes de digitalización de la enseñanza.
“Moro de mierda, te mato”, le gritaron los vigilantes de seguridad de la discoteca Mya en Valencia, mientras perpetraban la agresión y le golpeaban el pasado 6 de marzo, según recoge el atestado de la Policía Nacional.