Categoría: Palestina y Oriente Próximo
 
			 
		Desde los primeros momentos en los que asistí al 7 de octubre, la operación que ha cambiado el curso de la historia, me preguntaba: ¿Qué le pasó por la cabeza a Yahya Sinwar? ¿Qué pensaba un hombre que abría las puertas del infierno a Gaza y a su gente? ¿Había perdido el control? ¿Se estaba suicidando? O más bien, ¿era Gaza en su totalidad la que se estaba suicidando? ¿Se trataba de una estrategia puramente militar o de algo diferente, más profundo?
 
		La firma del acuerdo de paz entre Israel y Hamás ha suscitado, razonablemente, grandes esperanzas de que se pueda llegar a un «alto el fuego» definitivo. No obstante, tras dicho acuerdo se esconden nuevas formas de colonialismo y depredación/saqueo de la población palestina y los territorios ocupados. La guerra de las armas y los escombros deja así paso a una nueva guerra: la del negocio de la reconstrucción, la especulación y el beneficio para unos pocos.
 
		Israel sigue entregando cuerpos de palestinos tan desfigurados que tienen que ser enterrados sin identificar. A la vez, exige la devolución inmediata de los israelíes muertos y solo permite la entrada de maquinaria para rescatar a estos, ignorando a los miles de palestinos enterrados bajo escombros.
 
			 
			 
			