El destacado economista y cientista social egipcio Samir Amín se consideraba un practicante del desarrollo, no un teórico del desarrollo. La crítica al proceso de acumulación de capital en el sistema capitalista debe ser permanente, pero no separada de la política, por lo que había que acompañar también la lucha de los pueblos, incluyendo los latinoamericanos, promoviendo la creación de diversos foros internacionales, como el Foro Mundial Social y el Foro Mundial para las Alternativas (FMA) en contra del comercio desigual y políticas excluyentes sustentadas en el despojo de los bienes naturales y sobreexplotación permanente del trabajo, como una de la fuentes primarias del valor.
La ciudad de Tegucigalpa, Capital de Honduras, fue sede del XXVII Encuentro del Foro de Sao Paulo, que integra partidos y movimientos políticos de Latinoamérica y el Caribe. De la Declaración Final podemos destacar: a) condena al genocidio contra el pueblo palestino que reporta unos 37.000 muertos y más de 70.000 heridos y lesionados; b) las protestas en Latinoamérica en contra del neoliberalismo y su nuevo “Mesias”, Javier Milei; c) condena al bloqueo económico, comercial y financiero contra Cuba; d) la urgencia de relaciones con partidos políticos de los BRICS y Asia, buscando una integración más visible de una izquierda progresista global; e) condena al golpe de Estado contra Manuel Zelaya Rosales, que el 29 de junio de 2024 se conmemoran 15 años por el Partido Libertad y Refundación (LIBRE) en el poder; f) apoyo al principio de una sola China, siendo Taiwán parte de ella; g) reconocer los esfuerzos de Brasil y Colombia por preservar la Amazonia, amenazada por el narcotráfico, minería ilegal y deforestación acelerada.[1]
“El Foro de São Paulo se solidariza con el FMLN y las organizaciones sociales y populares en El Salvador, en la lucha que libran ante la grave crisis política, social y económica que se vive en el país. El actual Gobierno de derecha e inconstitucional ha creado un nuevo escenario político y social que ha deteriorado cada vez más las condiciones de vida de la gente al paso en que utiliza el régimen de excepción para encarcelar, perseguir y asesinar el pueblo salvadoreño”[2]. Ello no ha gustado a miembros del gabinete de Gobierno de Nayib Bukele, ya que “lideres” y expresidentes de El Salvador pertenecientes al FMLN han sido condenados por actos de corrupción y huyen de la justicia, siendo evidente la popularidad del actual mandatario, reelecto para un segundo mandato.
En este marco se celebró además la segunda reunión de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) Social [3], donde participó también el Grupo de Puebla, la Red de Intelectuales, Artistas y Movimientos Sociales en Defensa de la Humanidad y la Mesa de Integración Latinoamericana y Caribeña. Es un espacio de discusión paralela y/o complementaria que surgió en 2023, al celebrarse la VII Cumbre de CELAC en Buenos Aires, Argentina. La presidenta Xiomara Castro ejerce desde marzo de 2024 la presidencia pro témpore del organismo.
Xiomara Castro asumió la presidencia de la CELAC en la VIII Cumbre de Jefes de Estado y de Gobierno celebrada en San Vicente y Granadinas, donde destacó la importancia de fortalecer los procesos de integración latinoamericana, sustentada en varias propuestas que apoyará en lo que queda de su gestión. La primera es el respeto a la soberanía, independencia y autodeterminación de los pueblos, cuestionando los efectos negativos de la vigencia del modelo neoliberal visibles con el calentamiento global, privatizaciones corruptas y alta inflación. La segunda referida a la lucha por la soberanía económica y financiera, apoyando las iniciativas y propuestas de reconversión de deuda y eliminación de paraísos fiscales, como un medio de descapitalización de las economías. Habla de la soberanía alimentaria y ambiental, sumado al respecto de los DDHH, lucha contra el racismo, intolerancia de clase y acoso judicial. [4]
Sobre esta base es que debería conformarse una agenda de trabajo detallada de la CELAC en bloque, por países y frente a terceros, que incluya la CELAC-Social. Como instancia de diálogo y concertación política, la CELAC, constituido en diciembre de 2011 en Caracas, Venezuela, apoya la integración latinoamericana, pero también se pronuncia en contra de la desigualdad, dependencia, comercio asimétrico, deterioro ambiental, concentrado esfuerzos en planes, proyectos, estrategias, agendas y convenios de cooperación entre gobiernos y organizaciones políticas y sociales. [5]
En Tegucigalpa la Declaración Final de la CELAC Social [6] destacó el derecho humano a la migración de los pueblos y personas, justicia ambiental y derechos humanos a favor de los pueblos indígenas (Justicia para Bertha Cáceres) que se han venido cercenado con los proyectos extractivos, militarización de los espacios territoriales y criminalización de los dirigentes populares y ambientales. Hubo denuncias en contra del Banco Mundial y su instrumento del Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones (CIADI), una especie de colonización moderna donde se castiga a los países y gobiernos por resistirse al despojo de sus bienes patrimoniales. [7]
Se considera que “la apropiación de los bienes comunes de la naturaleza y la biodiversidad, la vulneración de los derechos laborales, en particular de las mujeres son pilares centrales del modelo capitalista extractivista y agronegocios. Para enfrentar este modelo debemos consolidar una agenda regional de reforma agraria con justicia social, ambiental y de género. Fomentar la producción local y soberana con arraigo productivo y cuidado del medioambiente. Nosotros y nosotras, los que vivimos en el territorio, en el campo debemos pelear para que sea en el campo donde se garanticen los derechos y se impulsen a la educación y formación. En alianza con las ciudades, los pequeños productores y agricultores, respetando nuestras formas comunitarias y solidarias de producción, a través del comercio justo debemos consolidar un nuevo modelo de desarrollo” [8].
La reconcentración de la propiedad rural es uno de los legados más visibles de la ejecución de políticas neoliberales en el agro latinoamericano, acompañado del aumento de la inseguridad alimentaria, hambre, pobreza y migración masiva. El expediente de la Reformas Agrarias Integrales no se ha cerrado, necesita de esfuerzos conjuntos entre gobiernos y organizaciones campesinas e indígenas, para constituir espacios de diálogo y trabajo más visibles, siendo la CELAC Social uno de ellos [9]. La mayor parte de gobiernos progresistas en Latinoamérica, pertenecientes a la llamada segunda “ola”, no tienen en sus agendas la reforma agraria integral con enfoque de derechos como política de Estado reivindicativa, por lo que se antepone el libre comercio y tratados suscritos, afectando la producción de alimentos y volviendo a los países más dependientes.
La reunión de CELAC Social sirvió también para exigir mayor captación de recursos por parte del Estado, eliminando exoneraciones y exenciones fiscales que, como en el caso de Honduras, datan desde hace 50 años. Implica una nueva justicia tributaria para gravar a los que más tienen y cobrar lo justo, incluyendo las ganancias patrimoniales y propiedades. Curiosamente, el Fondo Monetario Internacional (FMI) no tiene objeción, en tanto demanda recursos para que se honren las deudas que crecieron con el Covid-19 y crisis internacional.
La CELAC Social aspira construir una visión de horizonte progresista con el socialismo democrático, pero se ocupa empezar por entender cuál es su contenido y alcances, lo que va más allá de la denuncia. A lo interno de los países con agendas de cambio estructural, los objetivos de política que se persiguen con un modelo alternativo al neoliberalismo no deben ser abandonados, caso de la protección y uso racional de los recursos naturales, producción alimentaria y generación masiva de empleos de buena calidad, por atender el cumplimiento de objetivos contrapuestos como aumento de ingresos por extractivismo, empleos con salarios espurios e importación masiva de alimentos en el marco de los tratados comerciales supranacionales.
Para gobiernos latinoamericanos tipificados de corte neoliberal, se desconoce la existencia de una CELAC Social, por lo cual desautoriza la Declaración de Tegucigalpa, cuyo contenido no comparten. Estos países son: Costa Rica, Panamá, Argentina, Chile, Ecuador, Guatemala, Paraguay, Perú, República Dominicana y Uruguay. En el caso de Honduras preocupa esta manifestación, ya que existen esfuerzos liderados por Xiomara Castro para reactivar el proceso de integración centroamericana, necesitándose el apoyo de todos los países y gobiernos [10]. Sin embargo, hay que reconocer que la Declaración concentra voces como partidos y organizaciones políticas y grupos sociales regionales, más que presidentes o vicepresidentes actuales de los gobiernos convocados.
La reunión del Foro de Sao Paulo y CELAC Social movilizó también a la oposición política aglutinada en el denominado “Ejercito Ciudadano de Paz”, que concentra a dirigentes de partidos políticos, militares en retiro y pastores evangélicos. Se cuestionó la presencia del excandidato presidencial del Partido Nacional Nasry Asfura y demás dirigentes y funcionarios del Gobierno de Juan Orlando Hernández (JOH), acusados de actos de corrupción. Siendo notoria la ausencia de Salvador Nasralla, fundador del Bloque de Oposición Ciudadana (BOC), que fue utilizado por dirigentes del Partido Nacional para negociar inmunidad.
El cumplimiento de la agenda de país en temas de ambiente, desigualdad, soberanía y seguridad alimentaria, empleo, migración, seguridad pública, protección social, comercio justo y combate a la corrupción, necesita avanzar más rápido, por lo que el Gobierno debe integrar (de forma más visible y efectiva) a la gestión pública más actores de la sociedad civil, priorizando aquellas intervenciones que, siendo promesas de campaña, ameritan ser cumplidas y donde los espacios de cooperación e integración regionales pueden ser de mucha ayuda.
Universidad de Valle de Sula, San Pedro Sula, Honduras, 5 de Julio de 2024
Notas:
[1] Ver Declaración Final del XXVII Encuentro del Foro de Sao Paulo, celebrado en Tegucigalpa, Honduras, 27 de Junio de 2024.
[2] Declaración Final del XXVII Encuentro del Foro de Sao Paulo, op. cit
[3] Analistas políticos y expertos en derecho internacional y cooperación, consideran que el CELAC Social no existe, y el tema social es parte de la estructura interna y áreas de trabajo del propio CELAC inicial.
[4] Ver Xiomara Castro asume presidencia pro tempore del CELAC con 7 propuestas, Ministerio de Trabajo y Seguridad Social, Tegucigalpa, 5 de marzo de 2024.
[5] En el caso de las relaciones con la UE, ya hay un avance en este campo, al celebrarse la tercera reunión de Jefas y Jefes de Estado y de Gobierno CELAC – UE en Bruselas, los días 17 y 18 de Julio de 2023, después de ocho años de acefalía. Incluyó temas relacionados con el medio ambiente, tecnología digital, económicos, energéticos y de seguridad ciudadana, multilateralismo.
[6] Ver Declaración Final CELAC Social, Tegucigalpa, 29 de junio de 2024
[7] Honduras ha denunciado este mecanismo de arbitraje y prácticamente renuncia al mismo, en el caso de la demanda interpuesta por ejecutivos de la Zona de Empleo y Desarrollo (ZEDES) -Prospera en contra del Estado de Honduras, al derogarse la Ley de las ZEDES, pero no ratificarse dicha derogación por el Congreso Nacional.
[8] Declaración Final CELAC Social, op.cit.
[9] A lo interno, el gobierno de la República a través del Instituto Nacional Agrario (INA) apoyado por organizaciones como la Vía-Campesina, Plataforma Agraria y grupos indígenas, debe presentar al Congreso Nacional una nueva propuesta de reformas a la Ley para la Modernización y Desarrollo del Sector Agrícola (LMDSA), permitiendo el acceso a tierra productiva por los campesinos, especialmente mujeres, sustentada en una evaluación de sus impactos negativos después de más de 30 años de vigencia.
[10] Recién, la presidenta Xiomara Castro hizo el traspaso de la presidencia Pro Tempore del Sistema de Integración Centroamericana (SICA) a Nicaragua, siendo uno de los temas de agenda urgentes su reactivación como espacio de dialogo regional conjunto.
Javier Suazo. Economista hondureño, especializado en políticas económicas y estudios doctorales en economía, catedrático de la Facultad de Ciencias Sociales de la UNAH.
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