Responsabiliza a mandatario hondureño por ola de violencia
La madrugada de este viernes (9/5), José Guadalupe Ruelas, director de Casa Alianza Honduras, organización que vela por el bienestar y la protección de niños, niñas, adolescentes y jóvenes, fue detenido por miembros de la Policía Militar frente a Casa Presidencial, en Tegucigalpa, y salvajemente golpeado.
De acuerdo con un primer análisis médico, Ruelas sufrió golpes contusos en la espalda, costados, tórax, cara y hasta podría tener una fractura del tabique nasal. La policía lo acusa de atropellar a dos miembros de la seguridad del ministro del Seguridad, Arturo Corrales.
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«Acababa de salir de un evento en un hotel capitalino cuando la Policía me detuvo frente a Casa Presidencial. En ese momento una moto se estrelló contra mi vehículo y varios policías militares me arrastraron fuera del carro, me golpearon, me agarraron a patadas, me llevaron hacia casa Presidencial y luego hacia una posta policial, donde me hicieron seis veces la prueba de de alcoholemia sin que resultara nada», dijo Ruelas a medios nacionales después de haber sido liberado.
El director de Casa Alianza asegura que lo que ha ocurrido esta madrugada no es más que la respuesta de un gobierno que no quiere escuchar las críticas, ni aceptar que está equivocado. «Me golpearon y patearon. En la espalda tengo todavía las huellas de las botas de los policías militares. Y lo peor es que lo que he sufrido esta noche es nada comparado con lo que los niños y niñas de Honduras sufren», agregó.
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En un reciente informe, Casa Alianza reveló que, durante los primeros tres meses del año, en Honduras han muerto en condiciones violentas 270 jóvenes menores de 23 años, lo que indica un promedio de 90 muertes por mes. El informe mensual de la situación de derechos humanos de los niños, niñas y jóvenes destacó que en enero murieron 93 jóvenes, en febrero la cifra se ubicó en 84 muertes violentas y en marzo la cantidad se elevó a 94 jóvenes. En el período que va de febrero de 1998 a marzo de 2014, fueron asesinados en Honduras 9 mil 291 jóvenes menores de 23 años.
El Observatorio Nacional de la Violencia de la UNAH reporta que en los primeros tres meses del presente año, en Honduras ha habido 19 masacres, donde perdieron la vida 68 ciudadanos – en su mayoría menores de 30 años. Entrevistada por Opera Mundi, la ex comisionada María Luisa Borjas dijo que «nuestros jóvenes han sido marginados, no tienen acceso a sus derechos básicos, y ahora están siendo criminalizados, perseguidos y asesinados. Esto es lo que de verdad está sucediendo en Honduras».
JOH es el responsable
José Guadalupe Ruelas responsabilizó de la brutal golpiza al mandatario hondureño Juan Orlando Hernández. «Los que me sacaron del vehículo y me golpearon fueron los policías y los militares de Juan Orlando Hernández. Y esto porque he venido denunciando que hay una campaña sistemática de asesinatos de niños y niñas en Honduras. No me voy a callar y esto que me han hecho simplemente me va a dar más fuerza y demuestra que tengo la razón», aseguró el director de Casa Alianza Honduras.
Según el Observatorio de la Violencia de la UNAH, el año pasado Honduras registró una leve baja en la tasa de homicidios, pasando de 85.5 homicidios por cada 100 mil habitantes en 2012 a los 83 que esa entidad académica registra para 2013. Estas cifras contrastan con las de la Policía hondureña, según la cual la tasa de homicidio sería de 75.1 por cada 100 mil habitantes.
Independientemente de dicha discrepancia, Honduras se coloca nuevamente como el país con la tasa de homicidios más alta del mundo, es decir con más de siete mil muertes violentas por año, casi 12 veces el promedio mundial (6.9 homicidios) y ocho veces mayor que la tasa que la OMS (Organización Mundial de la Salud) utiliza para definir el «estado de epidemia».
Ruelas pidió públicamente a JOH replantear su política de seguridad. «¡Basta ya de esta matanza contra los niños y niñas de Honduras! Usted es el único responsable de la ola de muerte y violencia que hay en este país, y de que la política de seguridad no esté funcionando. Y si no lo puede hacer… por favor renuncie», sentenció.
También lo responsabilizó por cualquier cosa que le pueda pasar a él, a su familia y a la organización a la cual pertenece».
Fuente: LINyM