¿Dónde va Europa? Hablar de crisis es también hablar de Bruselas y de Berlín, del Banco Central y de Mario Draghi, de Angela Merkel y de la Comisión, de las reuniones del Consejo y del Parlamento -del Parlamento poco-, de los hombres de negro y de algo que se denomina troica, de la austeridad y […]
¿Dónde va Europa?
Hablar de crisis es también hablar de Bruselas y de Berlín, del Banco Central y de Mario Draghi, de Angela Merkel y de la Comisión, de las reuniones del Consejo y del Parlamento -del Parlamento poco-, de los hombres de negro y de algo que se denomina troica, de la austeridad y de las políticas de crecimiento.
La actualidad pasa por Bruselas. En Bruselas se decide todo, pero Bruselas es, en esencia, los estados miembros allí reunidos. Y cuando se van, los estados miembros reniegan de Europa. Porque se han permitido irresponsabilidades en el sur, dicen en el norte. Porque se han adoptado las medidas dogmáticas del norte, dicen en el sur. La solución pasa, coinciden todos, por más Europa, pero nadie parece dispuesto a ceder para ello.
La crisis económica ha arrastrado el proyecto europeo a una crisis institucional de magnitudes imprevisibles. El déficit democrático y estructural de las instituciones ha quedado descarnadamente a la vista de todos, ante la imposibilidad de tomar decisiones en momentos de urgencia.
En un intento modesto de poner orden a todo este entramado incomprensible que monopoliza a diario las portadas, el proyecto ¿Quo Vadis Europa? nace con el objetivo de pedir a los propios responsables de las instituciones que expliquen qué es Europa, qué le pasa en estos momentos de crisis y desafección y, sobre todo, hacia dónde va este proyecto que nació con tantas expectativas y generó tanta admiración. Con el convencimiento de que más allá de las carencias de funcionamiento, Bruselas y todo lo que el término implica, tiene unas carencias abismales de explicación y de comprensión.
Para ello se ha entrevistado a periodistas, políticos, miembros de la Comisión, diputados del Parlamento, y funcionarios del Consejo. Un amplio abanico para intentar abarcar todo el conjunto y contarlo desde todos sus puntos de vista.
El resultado de las más de veinte entrevistas es un documental de 27 minutos que, mediante el propio relato de los protagonistas, va desgranando las causas de la crisis económica e institucional de la Unión Europea, propone algunas posibles soluciones y, sobre todo, pone de relieve la complejidad y la divergencia de criterio que subyace en la construcción europea.