Traducido para Rebelión por Gorka Larrabeiti y Juan Vivanco
El jefe del grupo parlamentario del Pdl [el partido de Berlusconi], Fabrizio Cicchitto, explicó en la Cámara que desde 1994 se había desatado «una campaña de odio» contra Silvio Berlusconi. Por suerte el Presidente del Gobierno [Berlusconi] intervino enseguida desde el hospital San Raffaele, donde está ingresado tras la vergonzosa e injustificable agresión que sufrió el domingo por la noche, recordando que «el amor vence al odio». Lo demuestran, entre otras cosas, los cientos de intervenciones suyas y de representantes del centroderecha que en los últimos 15 años se han distinguido por el buen gusto y la ponderación. He aquí una antología, necesariamente breve, de las mejores frases pronunciadas por el que podría llamarse Partido del Amor.
Los buenos modales con los adversarios. «Veltroni es un gilipollas (stronzo)» (Berlusconi, 3/9/95). «Veltroni es un miserable» (Berlusconi, 4/4/2000). «Giuliano Amato, el tonto útil que ocupa la Presidencia del Gobierno» (Berlusconi, 21/4/2000). «¿Prodi? Un líder de segunda mano» (Berlusconi, 22/2/95). «Bindi y Prodi son como los ladrones de Pisa: se pelean de día para robar de noche» (Berlusconi, 29/9/96). «Prodi es la máscara de los comunistas» (Berlusconi, 22/5/2003). «Prodi es un gran mentiroso, un peligro para todos» (Berlusconi, 21/10/2006). «Antes de las elecciones sólo pude enfrentarme dos veces en televisión con mi adversario, y con sólo dos minutos y medio para contestar a las preguntas del periodista y a las gilipolleces que decía Prodi». (Berlusconi en la Escuela de Formación Política de Forza Italia, 2 de julio de 2007).»Con Prodi en la Presidencia del Gobierno hay que decir: llueve un gobierno ladrón » (Berlusconi, 10/4/2008). «¿El centroizquierda? Mentecatos, miserables que están para el arrastre» (Berlusconi, 4/4/2000). «Señor Schulz, sé que en Italia hay un productor que está montando una película sobre los campos de concentración nazis. Le recomendaré para el papel de carcelero nazi (kapo)» (al inaugurar la presidencia italiana de la Unión Europea, en respuesta a una pregunta del jefe del grupo socialdemócrata, el alemán Martin Schulz, sobre el conflicto de intereses, 2 de julio de 2003). «Estoy en política para que el Bien prevalezca sobre el Mal. Si la izquierda llega al gobierno el resultado será este: miseria, terror, muerte. Como sucede allí donde gobierna el comunismo» (Berlusconi, 17/1/2005).
El respeto a los electores. «¡Menuda cara de mema tiene usted!» (a la señora Anna Galli, de Rímini, que le interpelaba, 24/7/ 2003).»No creo que los electores sean tan estúpidos como para confiar en gente como D’Alema y Frassino, que tienen una complicidad moral con quienes han cometido los peores crímenes, como el camarada Pol Pot» (Berlusconi, 14 dicembre 2005). «Tengo demasiada estima en la inteligencia de los italianos para pensar que hay por ahí una panda de gilipollas dispuestos a votar contra sus propios intereses» (discurso de Berlusconi ante la patronal del comercio el 4/4/2006). «Nuestras tres I: inglés, internet, empresas (imprese) . Las del Ulivo [izquierda]: insulto, insulto e insulto» (27/5/2004).
La armonía con los aliados. «Hablemos de la par condicio: si no hemos ganado las elecciones, querido Follini, es por culpa tuya que no la quisiste abolir». Follini: «No doy crédito. Creía que teníamos que hablar de los problemas de la mayoría y del gobierno». Berlusconi: «No hagas como que no entiendes. La par condicio es fundamental. Entiendo que tú no te des cuenta, visto lo mucho que sales en las cadenas RAI y Mediaset». Follini: «En las cadenas de Mediaset he tenido 42 segundos en un mes». Berlusconi: «No digas tonterías: la verdad es que en Mediaset nadie te ataca jamás». Follini: «Sólo faltaba que me atacaran». Berlusconi: «Como sigas así, te vas a enterar. Vas a ver cómo te tratan mis televisiones». Follini: «Quiero que quede claro a todo el mundo que he sido amenazado». (Discusión con el miembro del UDC y Vicepresidente del gobierno, Marco Follini, según los diarios del 11 de julio de 2004).
La sacralidad de los jueces. «Los jueces están locos, son antropológicamente distintos del resto de la raza humana… Si haces ese trabajo, debes padecer algún tipo de perturbación psíquica» (Berlusconi, The Spectator, 10/9 2003). «En todos los sectores puede haber cuerpos desviados. Yo guardo gran estima por la magistratura, pero hay togas que operan con fines políticos. Son como [los terroristas] de la banda del Fiat Uno blanco» (Berlusconi, después de la detención del juez Renato Squillante, acusado de corrupción 14/5/96. Se refiere a los que lo arrestaron). «Los DS [Democratici di Sinistra] son los inductores de las togas rojas. Nosotros no atacamos a la magistratura sino a unos pocos jueces que se han vuelto el brazo armado de la izquierda y que pretenden allanar a ésta la conquista del poder» (Berlusconi, 1/12/99). «Hay que detener a los jueces de Manos Limpias: son una asociación de delincuentes con licencia para matar que apunta a la subversión del orden democrático» (Vittorio Sgarbi, «Sgarbi quotidiani», Canale5, 16/9/94). «[El juez] Gian Carlo Caselli es la vergüenza de la magistratura italiana. Estamos en pleno fascismo: se comporta como un coronel griego, de modo dictatorial, arbitrario, intolerante. Sus documentos judiciales han conducido a la muerte» (Vittorio Sgarbi, 8/12/94). «En mis televisiones privadas no ha habido jamás programas con ataques porque somos liberales» (Berlusconi, 21/ 5/2006). «Silvio Berlusconi, durante la Mesa del Pueblo de la Libertad, todavía vigente, según testimonios de algunos participantes, ha hablado de una auténtica persecución judicial contra él, que lleva al país al borde de la guerra civil»(Ansa, 29/11/09).
La fe en la democracia. «Se ha recurrido al arma de los procesos políticos para eliminar la oposición democrática. Ya no somos una democracia, sino un régimen. Desde hoy nuestra oposición ha dejado de ser una oposición contra un gobierno para pasar a ser una oposición contra un régimen» (Berlusconi, tras una condena en primera instancia por corrupción, 8/8/98). «La libertad no se puede conquistar en el Parlamento, sino mediante hombres lanzados a una lucha de liberación. Sin la devolución, desde aquí pueden salir órdenes de ataque desde el Norte. Yo estoy seguro de que cuento con diez millones de lombardos y vénetos listos para luchar por la libertad» (Umberto Bossi al «parlamento padano», presente Berlusconi, Ansa, 29/9/2007). «Boicotearemos el Parlamento, abandonaremos el hemiciclo, si es necesario daremos vida a una resistencia para reconquistar la libertad y la democracia» (Berlusconi, 3/3/95). «En Italia hay un Estado manifiesto, constituido por el gobierno y su mayoría en el Parlamento. Luego hay un Estado paralelo: el organizado por la izquierda como forma de poder en las escuelas y las universidades el periodismo y las televisiones, los sindicatos y la magistratura, en Consejo Superior de la Magistratura y en los Tribunales de Apelación Regionales, hasta la Corte Constitucional. Si se consiente a este Estado oculto unirse al Estado patente, tendremos en Italia un régimen vengativo y justicialista, disfrazado de legalidad, hostil a todo aquello que es privado» (Berlusconi, 5/4/2005). «Ahora dirán que ofendo al Parlamento, pero esta es la pura realidad: las asambleas multitudinarias son absolutamente inútiles, por no decir contraproducentes» (Berlusconi, 21/5/2009).
Las buenas maneras institucionales. «El presidente [de la República] Scalfaro es una serpiente, un traidor, un golpista» (Berlusconi, La Stampa, 16/1/95). «¡Cómo que impeachment! A Scalfaro habría que procesarlo ante el Tribunal Supremo por atentado contra la Constitución. De nosotros dos el que ha manejado fondos negros no soy yo, desde luego. Por otro lado, Scalfaro, como juez, hizo que fusilaran a una persona invocando al mismo tiempo el perdón cristiano. En fin: ¡así es este hombre! Ha instaurado un régimen mixto de monarquía y aristocracia» (Berlusconi 18/1/95). «Yo no tengo ningún enfrentamiento con el Jefe de Estado, no tengo motivos; es más: soy un convencido seguidor suyo. Con él tengo una relación muy cordial» (Berlusconi, 28/2/95). «¡A tomar por culo!» (Berlusconi, acompañando el insulto con un gesto de la mano, mientras el presidente emérito Scalfaro denuncia en el Senado el «servilismo» de la política exterior de su gobierno para con los Estados Unidos a propósito de Irak, 27/9/2002). «Que le den por culo a Italia» (tres eurodiputados de la Liga Norte, comentando en el Parlamento Europeo de Estrasburgo la intervención del Presidente de la República Carlo Azeglio Ciampi, 5/7/05). «Estos señores, que han ganado unas elecciones amañadas, han echado mano arrogantemente a las instituciones: el Presidente de la República es uno de ellos» (Berlusconi, refiriéndose al presidente, Giorgio Napolitano, 21/10/06).
Fuente: http://antefatto.ilcannocchiale.it/glamware/blogs/blog.aspx?id_blog=96578