Tras los importantes movimientos sociales que vivieron Grecia, España y Francia, ahora será el turno de Portugal, donde los sindicatos esperan «la mayor huelga de la historia» del país
Los trabajadores portugueses del sector público y privado deberían responder de forma masiva el miércoles a una convocatoria de huelga general lanzada por los dos principales sindicatos del país, unidos por primera vez en 20 años para denunciar la austeridad impuesta por el Gobierno bajo la presión de los mercados.
Tras los importantes movimientos sociales que vivieron Grecia, España y Francia, ahora será el turno de Portugal, donde los sindicatos esperan «la mayor huelga de la historia» del país.
«La movilización de los trabajadores es enorme», aseguró el lunes el secretario general del principal sindicato CGTP, Manuel Carvalho da Silva. En momentos en que Portugal aparece como potencial nuevo blanco de los mercados y podría verse obligado a solicitar una ayuda financiera externa, al igual que Grecia e Irlanda, el dirigente sindical instó al Gobierno socialista de José Sócrates a rechazar «el chantaje de los usureros internacionales» y su «receta de sacrificios».
El parlamento portugués se apresta a votar de forma definitiva el viernes un presupuesto de austeridad sin precedentes para recortar el déficit del 7,3% al 4,6% del PIB (Producto Interior Bruto). Este plan de ajuste incluye una bajada de salarios, subida de impuestos y disminución de prestaciones sociales. Su aplicación daría lugar a una fuerte reducción del poder adquisitivo en un país en el que el salario mínimo es inferior a 800 euros.
«Es inaceptable que los trabajadores hagan lo esencial de los sacrificios», denunció por su lado Joao Proença, de UGT, central sindical históricamente cercana al Partido Socialista. «No se puede aceptar que la primera, segunda y tercera prioridad de Portugal sea el déficit», agregó este sindicalista, recordando que el índice de desempleo se sitúa en el 10,9%.
Varios sindicatos se alinearon detrás de la CGTP y la UGT y se anuncian huelgas en los bancos, la prensa, el sector petrolero y los transportes.
Por este motivo, ya fueron anulados más de 500 vuelos. Los puertos de Lisboa y Setubal también quedarían paralizados. Los desplazamientos serán muy complicados en la capital, donde no se prevé ningún servicio mínimo garantizado en los transportes.
La última huelga general de Portugal se remonta a mayo de 2007 y había sido organizada solo por la CGTP, cercana al Partido Comunista, para protestar contra la política de ajuste llevada a cabo ya por el primer Gobierno de Sócrates.
El líder de los sindicatos europeos, el británico John Monks, llegó el lunes a Lisboa para «ayudar a la preparación» de la primera huelga concertada desde 1988 y predijo «mucha agitación y huelgas generales en los próximos meses» en Europa.
Afectado por un crecimiento amorfo en los últimos años, Portugal acusa una deuda pública de 161.000 millones de euros, es decir, más del 82% de su PIB.
Fuente: http://www.rnv.gob.ve/noticias/index.php?act=ST&f=3&t=142886