
El mandato presidencial de Jovenel Moïse en Haití concluyó el pasado 7 de febrero y el pueblo haitiano ha salido nuevamente a las calles con la esperanza de dar un giro diametral a su realidad, encausándose hacia un nuevo proceso que pueda permitirles aspirar a superar las condiciones apremiantes de vida que han padecido en los últimos años, como parte del proceso de neocolonización que enfrentan desde el mismo momento de su liberación a principios del siglo XIX.