El Gobierno británico ha accedido a permitir que una base de la Fuerza Aérea sea utilizada como parte del sistema de defensa antimisiles que EEUU quiere instalar en Europa. Según anunció el ministro de Defensa, Menwith Hill, una estación de escucha del Ejército estadounidense ubicada en el norte de Inglaterra, será equipada con materiales de […]
El Gobierno británico ha accedido a permitir que una base de la Fuerza Aérea sea utilizada como parte del sistema de defensa antimisiles que EEUU quiere instalar en Europa.
Según anunció el ministro de Defensa, Menwith Hill, una estación de escucha del Ejército estadounidense ubicada en el norte de Inglaterra, será equipada con materiales de comunicación que permitan enviar avisos por satélite sobre lanzamiento de misiles.
Activistas antinucleares han denunciado que el Ejecutivo ha tomado esta decisión sin consultar al Parlamento.