Decenas de miles de ciudadanos griegos se manifestaron ayer por todo el país en el marco de una huelga general convocada contra la reforma del sistema de pensiones y para exigir el fin de las políticas de austeridad. En la capital, más de 100 mil personas según los organizadores, 40 mil de acuerdo con la […]
Decenas de miles de ciudadanos griegos se manifestaron ayer por todo el país en el marco de una huelga general convocada contra la reforma del sistema de pensiones y para exigir el fin de las políticas de austeridad.
En la capital, más de 100 mil personas según los organizadores, 40 mil de acuerdo con la policía, secundaron una marcha en la que se corearon consignas contra el gobierno, pidiendo la dimisión del Primer Ministro Alexis Tsipras, y contra el memorando de préstamo y las políticas de austeridad.
Una de las columnas más numerosas fue la organizada por el sindicato PAME, a cuyos integrantes se dirigió el Secretario General del Partido Comunista de Grecia, Dimitris Kutsumbas, para exigir al ejecutivo la retirada inmediata del proyecto de ley de reforma de la seguridad social.
La marcha volvió a recuperar un fuerte carácter reivindicativo, perdido en parte durante las convocatorias de los últimos dos años, y muchos colectivos profesionales volvieron a salir a las calles tras el desengaño de volver a sufrir duras medidas de austeridad.
Algunos manifestantes así lo expresaron a Prensa Latina, «empieza una nueva etapa», dijo Natasha, empleada administrativa de 53 años, «la gente atravesó un periodo de miedo al ver cómo un gobierno elegido para poner fin a las viejas políticas continúa con ellas, pero poco a poco se van reactivando».
Yorgos, responsable del sindicato de trabajadores del aeropuerto de Atenas, destacó la unidad de acción y defensa de los trabajadores y explicó que «en el aeropuerto hay 17 mil trabajadores, la mayoría de ellos no están sindicados, y debido a la precariedad y temporalidad de sus contratos no pueden defender sus derechos».
A mediodía, y durante unos minutos, miembros de la Federación Nacional de Productores Agrícolas deplegaron una gran pancarta desde la parte alta de la Acrópolis en donde pedían a los vendedores de los mercados populares que apoyaran la huelga hasta el viernes.
La marcha se desarrolló sin incidentes destacables, salvo la agresión a un periodista por un desconocido antes del inicio y unos breves enfrentamientos entre jóvenes encapuchados y unidades antidisturbios en los últimos momentos de la misma.