1. Panamá, la pequeña nación de cuatro millones de habitante, que durante más de un siglo (1904-2004), con los negocios del Canal, soportó al gobierno imperial de los EEUU, será la sede de la próxima cumbre de países de América. ¿Qué niveles de desarrollo e igualdad social alcanzó Panamá en 100 años de multimillonarios negocios […]
1. Panamá, la pequeña nación de cuatro millones de habitante, que durante más de un siglo (1904-2004), con los negocios del Canal, soportó al gobierno imperial de los EEUU, será la sede de la próxima cumbre de países de América. ¿Qué niveles de desarrollo e igualdad social alcanzó Panamá en 100 años de multimillonarios negocios yanquis en el Canal? Panamá debería ser hoy uno de los estados más prósperos del continente, sin embargo la FAO acaba de premiar al EX presidente Martinelli por la reducción del número de personas que padecen hambre, pobreza y desnutrición y por el mejoramiento de la cobertura educativa. ¿Hará un reclamo el presidente Juan Carlos Varela al imperio que después de un siglo o más de saqueo y explotación aún siga Panamá en las condiciones de cualquier país centroamericano?
2. «La cumbre de mandatarios -se dice- empieza en seis días (sábado 11) Es inminente la cumbre. No deja mucho tiempo para más preparación. Se presenta la posibilidad de un encuentro entre los líderes de Estados Unidos y Cuba; «se ha creado grandes expectativas en América Latina ante la posibilidad de pasar la página al último capítulo de la guerra fría en la región». La presencia de Obama obligará a gobiernos lacayos como México, a seguir fielmente a su amo; por el contrario obliga a Cuba, Bolivia, Ecuador, Nicaragua, Uruguay, Argentina, Brasil, a reafirmar sus posiciones dignas, independientes y antimperialistas en defensa de Venezuela, de la misma Argentina y de más países que han recibido recientemente agresiones directas e indirectas yanquis.
3. Antes de la revolución cubana (1959) y las luchas asiáticas y africanas por su independencia, casi todos los gobiernos del mundo tenían que inclinar la cerviz ante el presidente yanqui y esperar una especie de «milagro» para que sean escuchados y atendidos. Las revoluciones de los sesenta en adelante nos enseñaron a mirar de frente, a hacer las críticas y a pelear por nuestros derechos como pueblos oprimidos. En la Cumbre de Panamá seguro que los presidentes reclamarán porque hay mil y una cosas que demandar al imperio como el fin del bloqueo a Cuba y la plena libertad de todos los países a intercambiar o comerciar con ella es un asunto que ha sido aprobado más de 30 veces en la ONU y cualquier actitud contraria es violatoria.
4. Y si lo de Cuba no tiene la menor discusión, lo de Venezuela mucho menos. ¿De dónde sacan los idiotas yanquis que Venezuela es un peligro para la seguridad de los EEUU y posiblemente del mundo, si en la historia son los yanquis quienes hacen todas las intervenciones, bombardeos y guerras? Puta, un país de 30 millones de habitantes, que sólo exige respeto y paz, que por buscar construir un proyecto económico y político diferente al del imperio y los empresarios golpistas, se le coloca en el «Eje del Mal». ¿Cómo no exigir a este representante de los guerreristas gringos (Obama) que antes de salir de Panamá firme un acuerdo de respeto al gobierno venezolano y de no seguir apoyando a los empresarios golpistas encabezados por Capriles, Vargas Llosa y Felipe González?
5. En Argentina los yanquis han querido reventar al gobierno de los Kirchner porque no se ha sometido como los anteriores. Dice la Presidenta Cristina: «Argentina no es el patio trasero de nadie, es un país soberano con dignidad nacional. No somos un país de cuarta ni una ‘republiqueta’ bananera para que vengan a darnos indicaciones o consejo». ¿Qué han sido la bárbara intervención de los llamados «Fondos Buitres» que han querido ahorcar económicamente al país; así como el aprovechar el asesinato del fiscal Nisman para hacer grandes protestas, sino intervenciones yanquis como las mil una que nos enseña la historia del mundo? En esa Cumbre Obama tiene la obligación de aclarar su posición respecto a esas intervenciones
6. Barack Obama, como Kissinger (el ideólogo de Nixon) en los setenta, entró a su gobierno recibiendo el Nobel de la Paz. Se crearon expectativas de que su Presidencia sería muy distinta a la de Bush y antecesores; pero resultó – a pesar de su raza- la misma subordinada. Que «muy adentro» quería ser popular, y no lo dejaron; pero lo seres humanos somos lo que hacemos y no lo que decimos desear. Obama es un negro no un blanco; el futuro gobernante en EEUU, o en México, aunque sea cobrizo, mujer, homosexual, de origen obrero o campesino, tendrá la obligación (infortunadamente como los anteriores) de obedecer -como dicta la historia- a los hombres más poderosos fabricantes de armas, guerreristas, petroleros, de la FED.
7. ¿Cómo Obama, después aplastar luchas de los pueblos del mundo, puede lavarse la cara y las manos frente a Gobernantes valiosos como Raúl Castro, Maduro, Morales, Correa, Kirchner, Rousseff y demás que por lo menos en los últimos 15 años han sufrido abiertas amenazas y agresiones imperialistas? Si en esa Cumbre le mentan la madre a Obama y al imperialismo -como yo lo hago cada segundo- no es por falta de educación; es por sobre de dignidad de quienes quisiéramos ver muerto y enterrado hoy al más grande ejército asesino de la historia. Si bien Obama es sólo un títere -como han sido todos los presidentes- del imperio, no sería tonto decir que no tiene culpa por el hecho de aceptar ser un esclavo.
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