A un mes del inicio de las protestas en las fincas bananeras Sixaola 1, 2 y 3 de la compañía Banana Development Corporation (Bandeco), subsidiaria de Del Monte Foods, las y los trabajadores, en su mayoría provenientes de la comarca indígena Ngöbe-Buglé de Panamá, continúan exigiendo el respeto a sus derechos. Son más de 300 […]
A un mes del inicio de las protestas en las fincas bananeras Sixaola 1, 2 y 3 de la compañía Banana Development Corporation (Bandeco), subsidiaria de Del Monte Foods, las y los trabajadores, en su mayoría provenientes de la comarca indígena Ngöbe-Buglé de Panamá, continúan exigiendo el respeto a sus derechos.
Son más de 300 los trabajadores que fueron despedidos la primera semana de enero por la transnacional frutera norteamericana, la cual resolvió recontratar solamente a unos pocos afiliados a la filopatronal Unión de Trabajadores Bananeros de Sixaola (Untrabasi), con la cual acababa de firmar un nuevo convenio colectivo.
De esta manera, Bandeco no solo excluyó de la negociación a la organización afiliada al Sindicato de Trabajadores de la Empresa Pública y Privada (Sitepp), con la cual había firmado el anterior convenio colectivo que venció el 31 de diciembre, sino que se rehusó a recontratar a 253 de sus afiliados.
La intransigencia de la subsidiaria de Del Monte Foods para Colombia, Ecuador,AméricaCentral y Brasil, no dejó a los trabajadores otra opción que paralizar las fincas bananeras y llevar la protesta la calle, bloqueando puentes y carreteras a partir del pasado 16 de enero.
Alejandra Zúñiga, representante de los trabajadores de la finca Sixaola 1, explicó a un medio internacional que exigen el reintegro inmediato de los trabajadores despedidos, así como el respeto incondicional de todos los derechos que les otorga la convención colectiva.
La tensión es cada día más fuerte. Sin embargo, Bandeco continúa manteniendo su actitud intransigente.
Del Monte arrogante. Desborde de solidaridad con trabajadores
El pasado 19 de febrero, cientos de trabajadores bananeros, el 90 por ciento de ellos provenientes de la comarca indígena Ngöbe-Buglé de la vecina Panamá, volvieron a tomarse el puente sobre el río Sixaola y llevaron la protesta hasta el puerto de Limón.
Mientras tanto, y a pesar que Bandeco (Del Monte) y la Untrabasi se retiraron de la mesa de negociación, una delegación de los trabajadores en huelga volvió a sentarse con el gobierno, para buscar una solución negociada al grave conflicto.
«Hoy estamos aquí acompañando a nuestra gente, a nuestros hermanos indígenas panameños. Nos solidarizamos con su justa lucha y denunciamos la intransigencia de estas transnacionales, que nunca quieren escuchar la voz de los trabajadores», dijo a La Rel Abel Becker, secretario general del Sindicato de Trabajadores de la Industrial del Banano y Empresas Afines (Sitraibana) de Panamá.
«Es una vergüenza ver cómo siguen manipulando la realidad, violentando derechos y desmejorando las condiciones laborales», agregó.
El dirigente sindical hizo un llamado a los gobiernos de Costa Rica y Panamá para que se involucren con decisión en la búsqueda de una solución al conflicto, auspiciando el reintegro inmediato de todos los trabajadores injustamente despedidos, así como la negociación de un nuevo y legítimo convenio colectivo.
Fuente: http://nicaraguaymasespanol.