El proceso abrupto de disminución de la calificación financiera de la República portuguesa ha sido sostenido por una presión sin precedente de las agencias de rating. Ésta es la presuposición que inaugura la acción judicial de algunos académicos y economistas de las izquierdas contra las tres agencias de notación financiera que detentan el 90% del mercado: Standard & Poor’s, Fitch y Moody’s.
El proceso que llevó los intereses sobre la deuda pública portuguesa a un incremento histórico en el último año (de 6, 2% en mayo del 2010 a más 8,4% en marzo del 2011 para las emisiones a diez años.) ha sido presentado por José Reis, catedrático de Economía en la Universidad de Coimbra; José Manuel Pureza, líder parlamentario del Bloco de Esquerda e investigador de la universidad de Coimbra y por dos profesores del Instituto Superior de Economia e Gestão. Además, ha sido también lanzada una petición pública que en menos de una semana ha logrado obtener más de 5.000 suscripciones. El texto presenta los fundamentos críticos y judiciales para la presentación de la queja. En el texto de la denuncia se afirma que «el desencadenante de la crisis es el resultado de una responsabilidad imputable a personas e instituciones concretas, especialmente aquellas que han contribuido y beneficiado con los excesos del mercado financiero».
Los fundamentos jurídicos de la denuncia se basan en la presunta práctica de un delito de manipulación del mercado. Ese tipo de delito es punible por ley y los signatarios de la denuncia lo definen del siguiente modo: «La manipulación del mercado tiene como presuposiciones la divulgación de informaciones falsas o inexactas que conduzcan al logro y tengan como objetivo alterar artificialmente el regular funcionamiento de los mercados. Se trata de un delito material, ejecutado con el fin de obtener un beneficio o que resulta doloso para un tercero. En las actividades de las agencias encontramos indicios de todos esos requisitos». Aunque sean iniciativas elaboradas por gente reconocida y muy cualificada, todas las propuestas que rompan el discurso monocorde de la «austeridad» están condenadas al olvido mediático. No obstante, esta iniciativa, poco divulgada por los medios, ha logrado abrir el cerco que han creado los medios de comunicación portugueses.
Fuente: http://www.diagonalperiodico.net/Demanda-en-Portugal-contra-las.html