El fotógrafo español Edu León ha sido detenido y amenazado con ser deportado por la Gendarmería turca en la ciudad de Edirne, en el noroeste del país, según informó hoy a EFE su esposa y compañera de trabajo, Soraya Constante. Edu León, fotógrafo del periódico español ‘Diagonal’, especializado en asuntos de inmigración, fue detenido junto […]
El fotógrafo español Edu León ha sido detenido y amenazado con ser deportado por la Gendarmería turca en la ciudad de Edirne, en el noroeste del país, según informó hoy a EFE su esposa y compañera de trabajo, Soraya Constante.
Edu León, fotógrafo del periódico español ‘Diagonal’, especializado en asuntos de inmigración, fue detenido junto con su esposa este jueves por la mañana tras haber tratado de fotografiar un área cercana a la frontera turco-griega, conocida por ser uno de los mayores pasos de inmigrantes sin papeles con destino a la Unión Europea.
Según Constante, León se encontraba «a una distancia de una manzana» del puesto fronterizo de Pazarkule cuando trataba de hacer una fotografía ya que «ningún cartel señalaba que estuviese prohibido», cuando unos soldados lo detuvieron en torno a las 10.00 hora local (una hora menos en España).
Tras asegurarles que no se trataba de un asunto de mucha importancia, León, de nacionalidad española, y Constante, de nacionalidad ecuatoriana, fueron conducidos a un cuartel de la Gendarmería.
Allí, el fotógrafo español observó que llegaba un camión con inmigrantes a los que fotografió y, acto seguido, un gendarme se abalanzó sobre él tratando de arrebatarle la cámara, lo que desembocó en un forcejeo en el que León y Constante recibieron varios golpes y tirones de pelo.
Ambos fueron internados en el cuartel, separados, y solicitaron llamar a la Embajada Española, algo que no se les permitió.
Los gendarmes les comunicaron a los dos detenidos que habían enviado un fax al consulado español, pero que no había habido respuesta. Posteriormente fueron trasladados a un hospital para pasar un reconocimiento médico, en el que denunciaron la agresión del gendarme. «Les ofrecimos dejarles las tarjetas de memoria de las cámaras para poder continuar el viaje hacia Grecia como teníamos previsto pero nos aseguraron que no iba a pasar nada», relató Constante.
A los dos detenidos se les ofreció un abogado de oficio y acudió un traductor civil.
Además, se les aseguró que un juez había decretado que no se les podían devolver la cámara de fotos y las tarjetas de memoria incautadas, a pesar de que ninguno de los acusados compareció ante un tribunal.
Según el informe de la Gendarmería, al que tuvo acceso EFE, las órdenes de detención e incautación de los instrumentos de trabajo de Edu León procedieron de la Fiscalía por haber penetrado en una zona militar de nivel 1.
En torno a las 23.00 hora local, Constante fue puesta en libertad y León enviado a un centro de deportación.
«Nos han dicho que van a deportar a Edu a Grecia o España y que, si no acepta la deportación voluntaria, lo meterán en prisión», explicó Constante.
El pasado 26 de marzo, en la misma zona, fueron retenidos por el ejército y la Gendarmería turcas durante cuatro horas el periodista de EFE Andrés Mourenza, junto a los fotógrafos Álvaro Deprit, de nacionalidad española, y Alessandro Penso, de nacionalidad italiana.