Cuando a inicios del mes de julio, en el programa «Sin Fronteras» que dirige el periodista William Grigsby en Radio La Primerísima, se presentaron las pruebas del financiamiento de Estados Unidos a grupos de la oposición nicaragüense (más de U$ 28 millones entre 2017 y 2018), era más que evidente que se trataba de algo no sólo muy bien planificado, sino mucho más profundo y estructurado.
En efecto, este 31 de julio, en el mismo programa radial, Grigsby reveló la existencia de un documento de casi cien páginas, donde se sientan las bases para la contratación de una empresa que se encargue de desarrollar un minucioso plan para la subversión del orden público y en Nicaragua, hasta lograr la caída del gobierno sandinista.
Los términos de referencia para la ejecución del plan intervencionista incluyen el apoyo determinante de grupos y organizaciones de la oposición nicaragüense y su financiación a cargo de USAID, y se desarrollaría conforme a tres posibles escenarios para garantizar una supuesta «transición democrática» en Nicaragua.
En la sección del documento presentado el viernes pasado (unas 18 páginas) se prevé también la profundización de la crisis política, económica, social e incluso de salud, aprovechando la pandemia de coronavirus.
«El objetivo es claro: crear las condiciones para acabar con el gobierno de Daniel Ortega. Para hacerlo prevén tres escenarios.
El primero considera la posibilidad de una transición pacífica a través de la renuncia del presidente Ortega, elecciones anticipadas donde gana la oposición o elecciones ya programadas para noviembre del 2021 donde también gana la oposición», explicó Grigsby durante el programa.
En el segundo escenario no hay una transición pacífica, en cuanto el presidente Ortega no estaría creando las condiciones para que se den elecciones ‘libres y transparentes’. En ese segundo escenario es el partido de gobierno a ganar los comicios.
Finalmente hay un tercer escenario, que es donde el Frente Sandinista gana unos comicios que, tanto la oposición como sus aliados internacionales consideran ‘libres y transparentes’.
En el segundo y tercer escenario, el documento define las estrategias para subvertir el orden y lograr el derrocamiento del gobierno sandinista.
En el primer
escenario, la empresa que ejecutará el plan traza las líneas y define
las políticas que deberá implementar el nuevo gobierno para lograr la
‘transición democrática’, haciendo tabula rasa del sandinismo.
«Es
un documento asqueroso. ¿Qué tiene que hacer el gobierno de Estados
Unidos contratando a una empresa para subvertir el orden en un país
cualquiera? ¿Qué derecho le asiste? Es una intervención descarada. Antes
lo hacía con los marinos, ahora subvirtiendo el orden público y
financiando actividades políticas de la oposición. ¡Esto es
inaceptable!», dijo Grigsby.
Más abajo pueden ver el video de la presentación del documento durante el programa «Sin Fronteras» del 31 de julio.
También pueden descargar el documento original en inglés y su traducción al español
– Video «Sin Fronteras»
– Traducción al español del documento para descargar
– Original en inglés para descargar
Fuente: LINyM