El Sindicato de Maestros y Maestras de Educación con participación de las comunidades (SIMEDUCO), realiza el 5 y 6 de marzo el primer cese de labores en los Centros Educativos del país. Más de 400 mil estudiantes no recibieron clases ayer. El cese de actividades se da a partir de la negación por parte del […]
El Sindicato de Maestros y Maestras de Educación con participación de las comunidades (SIMEDUCO), realiza el 5 y 6 de marzo el primer cese de labores en los Centros Educativos del país.
Más de 400 mil estudiantes no recibieron clases ayer. El cese de actividades se da a partir de la negación por parte del Ministerio de Educación por el aumento salarial que está dispuesto en la Ley de la Carrera Docente, así como del incumplimiento del pago de un aumento general realizado en 2010, que los docentes no gozaron a pesar de que la misma ley establece que el aumento se debe de hacer efectivo para ese sector si hay un aumento general a los empleados públicos.
Para Manuel Molina, Secretario General del SIMEDUCO, a la base de este enfrentamiento entre el Magisterio y el Gobierno de El Salvadoreño, radica en que el ejecutivo está tratando de cumplir las medidas dictadas por el Fondo Monetario Internacional -que por cierto no alcanzó en el 2011-.
El gobierno de Funes se comprometió con reducir el déficit fiscal al 3.5% con el FMI y alcanzó a llegar al 4% [1], les faltaron cerca de 80 millones para llegar a la meta, todo eso para lograr un acuerdo Stand-By con esa institución. El gobierno para llegar a tal meta sacrificó a los docentes y a otros empleados públicos los que no vieron aumentos salariales. El acuerdo se sigue negociando para este año, y parece ser que las medidas seguirán siendo las mismas,no cumplir la ley que implica el aumento salarial de las y los docentes, privilegiando ese acuerdo con el FMI.
Por su parte, la gremial está pensando en elevar considerablemente las protestas y hablan incluso hablan de cerrar carreteras, tomarse las departamentales y llegar hasta la huelga indefinida.
Para Manuel Molina, no es posible que sea el pueblo quien pague los embates de la crisis neoliberal, todo porque el Gobierno Salvadoreño aplica la misma política fracasada. «No vamos a permitir que el Gobierno de Funes pisotee al magisterio, ni mucho menos al pueblo salvadoreño. Ya no creemos en esa farsa del supuesto cambio», sentenció en una entrevista concedida a tr.org.sv.
Nota:
[1] http://www.elsalvador.com/