Traducido para Rebelión por Guillermo F. Parodi y revisado por Caty R.
Se han detectado fallas en la cuba de una segunda central nuclear en Bélgica, el reactor número 2 de Tihange, las fallas son «similares» a las detectadas en la del Doel 3, indicó el jueves 13 de septiembre el productor de electricidad Electrabel, filial de GDF Suez.
«Los primeros resultados de las mediciones ponen de manifiesto que hay indicios similares a los del Doel 3», declaró un portavoz del grupo, confirmando una información publicada en el sitio del diario belga L’Echo.
Este verano (boreal) se detectaron miles de «potenciales fisuras» en inspecciones en el material de base de acero de la cuba que alberga el corazón del reactor Doel 3, situada a 25 kilómetros de Amberes (norte) y fuera de servicio desde principios de junio.
El reactor de Tihange 2, situado cerca de Lieja (sur), que posee una cuba igual a la del Doel 3, se paró a finales de agosto para inspecciones. «Las inspecciones del Tihange 2 siguen y tardarán aún algunas semanas antes de tener un resultado definitivo y global. Tihange 2 estará parado el tiempo necesario para poder terminar la investigación», precisó jueves el portavoz de Electrabel.
Escepticismo de las autoridades en agosto
Las cubas de los dos reactores fueron fabricadas en los años setenta por la misma empresa, el grupo neerlandés Rotterdamsche Droogdok Maatschappij (RDM), que luego cesó sus actividades. Esta sociedad equipó una veintena de reactores en el mundo, una decena en Europa.
El director de la Agencia federal belga de control nuclear (AFCN), Willy de Roovere, se había declarado en agosto «escéptico» en cuanto a la posibilidad de reactivar el Doel 3, que sólo se autorizará si Electrabel puede demostrar que la seguridad de la instalación no está en entredicho por los defectos detectados.
Leer: La fiabilidad de dos reactores nucleares cuestionada (en francés).
En el sitio http://transparency.gdfsuez.com, que contabiliza la capacidad de producción del grupo, el reactor de Tihange 2, de una capacidad de 1.008 MW, se señala ahora como fuera de servicio hasta el 1 de octubre.
La Comisión Europea abogó por inspecciones del tipo de las que revelaron el problema del Doel, pero no tiene el poder para imponerlas.