El ejército consideraba a pueblos enteros como enemigos en la lucha contra el «comunismo». Más de 200 mil personas fueron asesinadas entre 1960 y 1996; el peor periodo, entre 1982 y 1983.
Por primera vez en la historia se comprueba que el genocidio indígena en Guatemala en su peor etapa fue ordenado por el gobierno militar de Efraín Ríos Montt, revelan documentos oficiales obtenidos y divulgados hoy por el National Security Archive.
Los archivos de la llamada Operación Sofía contienen documentos militares secretos sobre la campaña de contrainsurgencia que resultó en matanzas de decenas de miles de civiles mayas en Guatemala, informó el National Security Archive (NSA) al divulgar el material. Los documentos establecen que la operación citada «fue ejecutada como parte de la estrategia militar del presidente de facto de Guatemala, el general Efraín Ríos Montt, bajo el comando y control de los oficiales militares de más alto rango», afirmó el NSA.
Más de 350 páginas de información
El documento del gobierno guatemalteco, de 359 páginas, detalla la matanza de hombres, mujeres y niños no armados, la destrucción de viviendas, cultivos y animales, y el bombardeo aéreo indiscriminado de refugiados. Los documentos incluyen planes operativos, mapas, órdenes, informes de resultados y reportes de patrullajes. Además, está la orden inicial de lanzar la operación fechada el 8 de julio de 1982 firmada por el jefe del estado mayor, general Héctor Mario López Fuentes.
El documento fue presentado este miércoles por Kate Doyle, directora del Proyecto Guatemala del NSA, ante la Audiencia Nacional de España que está procediendo sobre el caso de genocidio en Guatemala, en el cual están acusados Ríos Montt y otros altos oficiales (la querella original fue presentada por la Fundación Rigoberto Menchú Tum en 1999).
Doyle presentó los documentos ante el juez Santiago Pedraz, de la Audiencia Nacional, quien preside el caso. Los documentos fueron obtenidos por el NSA de fuentes de inteligencia militar en Guatemala, después que a principios de este año el ministro de Defensa, general Abraham Valenzuela González, había afirmado que no era posible localizar estos documentos, ni presentarlos ante un juez guatemalteco como fue ordenado por el tribunal constitucional de ese país en 2008.
En su resumen y análisis de los documentos presentados hoy ante el tribunal español, Doyle afirmó que la operación militar se lanzó el 16 de julio de 1982 en la zona de Ixil en El Quiché. El propósito, según se describe en el plan militar, era realizar operaciones contrasubversivas y sicológicas en el área de operaciones de la FT (Fuerza de Tarea) Gumarcaj
para exterminar a los elementos subversivos en el área
. La campaña duró hasta el 19 de agosto e involucró oficiales y tropas de varias unidades de las fuerzas armadas.
Doyle, en su presentación del archivo al juez, sostuvo que esta información nos da una imagen muy precisa de la intencionalidad del daño y el sufrimiento causado a las comunidades indígenas ixiles por el ejército en el curso de su campaña para erradicar a los grupos armados guerrilleros
. La documentación permite concluir «con certeza y claridad que la cadena de mando funcionaba en todo momento y que el alto mando -que en ese entonces hubiera incluido el presidente, comandante general del ejército y ministro de la Defensa de facto Efraín Ríos Montt y el viceministro de la Defensa Nacional Óscar Humberto Mejía Víctores, ambos imputados en este caso- estaba perfectamente enterado de las operaciones en el campo».
Los documentos revelan que el ejército consideraba a pueblos enteros como el enemigo en su lucha contra el comunismo
. Comandantes informan a sus superiores durante esta operación que durante más de 10 años, los grupos subversivos que han operado en el área del Triángulo IXIL, lograron un trabajo completo de concientización ideológica en toda la población, alcanzando ciento por ciento de apoyo
. En otro informe enviado por una de las patrullas militares a sus superiores, se reporta que en las aldeas no hay gente, toda está escondida. Todas las aldeas de la región están organizadas
. Y agrega que los guerrilleros ya tienen ganada a toda la gente, puesto que cuando ven al ejército, se esconden en las montañas
.
Como señala Doyle, se interpretaba el temor y la huida ante la presencia militar como prueba de que el pueblo entero formaba parte del enemigo
y, por lo tanto, se justificaba el ataque contra la población civil.
Al evaluar los archivos durante meses, Doyle dijo hoy que «hemos determinado que estos documentos fueron creados por oficiales militares durante el régimen de Efraín Ríos Montt para planear e implementar una política de ‘tierra arrasada’ sobre las comunidades mayas en El Quiché. Los documentos registran el asalto genocida de los militares contra las poblaciones indígenas en Guatemala».
Más de 200 mil personas fueron asesinadas o desparecidas entre 1960 y 1996 en Guatemala. El peor periodo de violencia fue entre 1982 y 1983, durante operativos contrainsurgentes con el estado justificando el exterminio de unas 440 comunidades indígenas como parte de la lucha anticomunista, reportó el Center for Justice and Accountability (CJA), organización internacional de derechos humanos que encabeza el caso ante la justicia española.
El National Security Archive, organización independiente de investigaciones sobre documentación oficial y libertad de información, colocó este miércoles toda esta documentación en su sitio de Internet: www.gwu.edu/~nsarchiv/guatemala/index.htm.
El caso sobre genocidio ha procedido desde 2006 ante la Audiencia Nacional. Para mayor información visitar el sitio de CJA en www.cja.org/article.php?list=type&type=369.
Fuente: http://www.jornada.unam.mx/2009/12/03/index.php?section=mundo&article=018n1mun